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Italia y España creen que todavía es pronto para saber si necesitarán sumarse al fondo de rescate de la Unión Europea ─el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE)─ para poder afrontar la crisis económica causada por la pandemia de COVID-19.

«Es prematuro decir si vamos a optar por protegernos con el MEDE o no», dijo el primer ministro italiano, Guiseppe Conte, en declaraciones a la prensa desde Madrid tras ser recibido por su homólogo español, Pedro Sánchez, en el Palacio de la Moncloa.

Estas palabras de Conte son más prudentes que las ofrecidas unas horas antes en una entrevista con el diario La Vanguardia, donde afirmó que el MEDE está pensado para «un shock distinto» al actual.

«La posición de mi Gobierno no ha cambiado. Como ya he dicho en anteriores ocasiones, creo que el MEDE es un mecanismo pensado para un shock distinto del que acaba de golpear nuestra economía», dijo Conte tras ser preguntado por unas declaraciones en la que la canciller alemana, Angela Merkel, invitaba a Italia a sumarse a ese fondo.

La posibilidad de acogerse al MEDE es una cuestión que crea una gran polémica en Italia, ya que esta vía genera bastante rechazos por las duras condiciones impuestas a otros países en el pasado.

Tanto en la citada entrevista como en la comparecencia de prensa ofrecida junto a Pedro Sánchez, el mandatario italiano insistió en que, en cualquier caso, no hay adoptada ninguna decisión al respecto y que finalmente se optará por acogerse o no a esos fondos en función de cómo se desarrolle la crisis.

Por su parte, Pedro Sánchez, también fue preguntado por la posibilidad de que España se acoja al MEDE, una cuestión a la que respondió sin descartar ningún escenario.

«No tiene sentido que creemos instrumentos y luego nos de vergüenza usarlos. No tiene que haber reparo en poder utilizarlos», afirmó antes de añadir que «ojalá no nos veamos obligado a utilizarlos porque eso significará que la pandemia estará controlada».

Aunque la cuestión del MEDE fue abordada por los dos dirigentes en su rueda de prensa conjunta, el encuentro entre Sánchez y Conte estuvo centrado sobre todo en preparar la próxima cumbre del Consejo Europeo, en la que se debatirá la aprobación del fondo de reconstrucción de 750.000 millones de euros propuesto por el Ejecutivo comunitario.