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Al menos 9 personas murieron y 33 resultaron gravemente heridas este domingo cuando el autobús en el que viajaban fue atacado por presuntos insurgentes y se despeñó por un barranco en la Cachemira administrada por India, cuya soberanía reclama Pakistán, informó la Policía.
El siniestro tuvo lugar cuando varios insurgentes abrieron fuego contra el vehículo e hirieron al conductor, que perdió el control del autobús y este cayó por un barranco, según detalló un policía del distrito de Reasi, donde sucedió el incidente.
La superintendente de Policía del distrito, Mohita Sharma, indicó a los medios que al menos nueve personas murieron mientras que 33 resultaron heridas, y agregó que la operación de rescate ha concluido.
Este ataque ocurrió al mismo tiempo que el primer ministro de la India, Narendra Modi, tomaba posesión de su cargo al frente del Gobierno, tras su victoria en las recientes elecciones generales. Hasta el momento, ningún grupo insurgente ha reivindicado el ataque.
Pakistán disputa a India la soberanía de la región desde la partición del subcontinente, y por ella han librado tres guerras y otros enfrentamientos menores.
Al menos cinco personas murieron ─tres soldados y dos insurgentes─, y otros dos militares resultaron heridos tras un ataque contra un campamento del Ejército en la Cachemira india, en el anterior incidente de gravedad en la zona, según informaron fuentes oficiales. Otras fuentes hablan de hasta 10 fallecidos.
El ataque ocurrió de madrugada cuando «algunos terroristas intentaron cruzar la cerca del campamento del Ejército» en el área de Pargal, en el distrito de Rajouri, indicó a la prensa el director general adjunto de policía de la división de Jammu, Mukesh Singh.
«El centinela les hizo frente y se produjo un intercambio de disparos», anotó Singh, que explicó que «se han enviado más fuerzas al campamento del Ejército para asegurar el área».
Un oficial del distrito indicó, bajo condición de anonimato, que en un principio resultaron heridos cinco militares en el ataque, pero tres de ellos murieron después de ser trasladados a un centro de salud cercano y los otros dos están recibiendo tratamiento.
Además se han recuperado los cadáveres de dos de los atacantes, aseguró.
El ataque ocurrió horas después de que la policía informara de la muerte de tres militantes en el distrito de Budgam, en el centro de Cachemira.
Ataques de este tipo no son habituales en la división de Jammu, que ha estado en gran medida libre de la presencia de militancia insurgente, sin embargo en los últimos meses ha vivido varios incidentes relacionados a grupos armados.
La Cachemira india es escenario frecuente de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad indias y varios grupos armados que buscan la independencia del territorio o su adhesión a Pakistán.
El disputado territorio lleva tres décadas asistiendo a una rebelión armada de carácter independentista, calificada como terrorista por Nueva Delhi, en la que han muerto decenas de miles de personas desde 1989, la mayoría civiles.
Pakistán disputa a la India la soberanía de la región desde la partición del subcontinente indio en 1947, tras la descolonización británica, y por ella han librado tres guerras y otros enfrentamientos de menor entidad.
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