OPINIÓN

Por Claudio Chaves, profesor de Historia y licenciado en Gestión Educativa. Director de Escuela Secundaria de Adultos. Especial para Lacity.com.ar
Con bombos y platillos y en épocas de vacas flacas el Presidente de la Nación Mauricio Macri junto al Ministro de Educación Alejandro Finocchiaro anunciaron un “novedoso” plan para enseñar matemáticas. Lo hicieron con palabras grandilocuentes, como que será la gran herencia que este gobierno dejará a la educación argentina.
De arranque no más podríamos decir que dos de las ideas vertidas entre simplezas y vulgaridades encierran un fuerte peligro:
“Lo importante es el camino recorrido y no tanto el resultado”
“Enseñar menos, aprender más”
Si de matemáticas, geometría y trigonometría hablamos tengo para mí que lo importante es el resultado. Perder de vista esto es peligroso especialmente cuando la precisión es fundamental a la hora de construir puentes, autopistas edificios, por caso. Claro me podrán decir la idea es solo aplicable a la primaria y la secundaria. Sin embargo por algo se empieza.
El concepto de evaluar el recorrido y no tanto el resultado no puede ser planteado como el argumento central de la “gran” reforma educativa. Cualquier docente con experiencia áulica no necesita esta sugerencia. La contempla aunque el resultado seguirá siendo lo importante, pues en algún lugar del recorrido el alumno se equivocó.
Enseñar menos y aprender más es lo que se viene haciendo desde hace años achicar la currícula es un error.
Como la matemática se ha transformado en el monstruo que los alumnos temen y rechazan la propuesta presidencial es que hay que hacerla divertida. ¡Tomá mate! El Presidente que batalla contra las grandes mafias de los narcos, el empresariado, la justicia y los dirigentes sindicales se hace un tiempito para auscultar el aula. Es posible que ande escaso de anuncios pero con el “aula no”. Sino los Directores de Escuela tendremos que meternos con la macro y la micro. “Cada lechón en su teta es el modo de mamar.”
Cuando el punto de inflexión está en la forma de enseñar, como dice el Ministro Finocchiaro el asunto no aplica a la gran reforma educativa. Supervisores y Directores deben abordar el problema, como en general se hace, dado que en la carrera docente que realizaron estaba implícito y explícito en las áreas pedagógicas. ¡A que agitar el avispero!
Que la enseñanza de las matemáticas debe ser interactiva, interdisciplinaria y aplicada, hace años que se viene hablando de esto en las instituciones que forman docentes.
Saberes significativos reza en toda planificación anual. Es un clima que se respira en las escuelas y en las habituales reuniones y cursos de capacitación. ¿Las deidades ministeriales han pisado alguna vez el aula? Está bueno recordarlo pero es demasiado poco para hablar de la gran herencia educativa.
