INTERNACIONAL

La Policía de España retuvo a Christian Ghisletti, barra brava de River, y lo deportará la noche del viernes a la Argentina.

El hincha, que arribó al aeropuerto de Barajas en las últimas horas, fue notificado por las autoridades migratorias y de esta forma ya son dos las personas que no lograron ingresar a ese país para ver la superfinal en el estadio del Real Madrid.

En la mañana del viernes regresó a la Argentina Maximiliano Mazzaro, barra de Boca que fue deportado por las autoridades españolas. Al tocar suelo argentino y tener un primer contacto con la prensa, manifestó: «(Daniel) Angelici me tiene de hijo hace rato».

Mazzaro fue deportado por tener antecedentes penales directamente vinculados al fútbol. En Madrid tiene lugar un operativo policial de gran magnitud para evitar incidentes entre los hinchas de River y Boca. En las últimas horas se confirmó que se destinarán 4000 efectivos para el partido.

La Policía de España espera entre 400 y 500 barras argentinos, y es por ese motivo que se dispuso un operativo de tal magnitud. Pero las autoridades migratorias quieren evitar directamente su ingreso al país. «La deportación tiene una regulación jurídica, se puede deportar a los que dicta la ley. En casos como el de Maximiliano Mazzaro se puede deportar, claro», expresó José Manuel Rodríguez Uribes, delegado de Gobierno de Madrid.