INTERNACIONAL

Si sorprendió el rechazo contundente del parlamento al plan de la primera ministra May para el divorcio con la Unión Europea, más sorprendente fue el hecho de que la libra esterlina, primer indicador de los acontecimientos políticos, ganara en valor tras el voto, pese a que muchos expertos, la mayoría, se mostraran convencidos de que una demoledora derrota haría caer la moneda.
La libra subió un 0,08% hasta los US$1,287 tras las bajadas que había registrado a principio de la jornada, de más del 1%.
La moneda se desplomó un 7% en 2018, en medio de la incertidumbre sobre las condiciones del Brexit.
Según el periodista de la BBC Simon Jack, la reciente hostilidad en la Cámara de los Comunes hacia la idea de un Brexit sin acuerdo -un extremo al que los mercados se muestran más reacios- ha convencido a muchos inversores de que ese final es muy improbable.
La opción de un Brexit duro (sin acuerdo) es la peor opción vista por la mayoría de parlamentarios y por la propia May. Este causaría graves consecuencias negativas en la economía británica.
