INTERNACIONAL

El presidente Donald Trump dijo ayer martes que no estaba contento con el acuerdo alcanzado por los negociadores del Congreso en materia de seguridad fronteriza que le negó fondos para su prometido muro entre México y Estados Unidos. Aunque no lo rechazó de plano pese a estar indeciso por la suma ofrecida de US$1,37 mil millones para cercas fronterizas, ya que los demás republicanos le pidieron su apoyo.
«Tengo que estudiarlo. No estoy contento con eso», dijo Trump a los periodistas en la Casa Blanca sobre el acuerdo, que tendría que ser aprobado por la Cámara de Representantes liderada por los demócratas y el Senado controlado por los republicanos y refrendado por él.
La demanda de Trump en diciembre por US$5,7 mil millones al Congreso para ayudar a construir un muro en la frontera sur provocó el cierre por 35 días de aproximadamente una cuarta parte del gobierno federal.
Sin embargo, Trump dijo que no esperaba otro cierre, mientras continuaba insistiendo en que podría encontrar una manera de evitar el Congreso y construir un muro sin legisladores. «No creo que vayas a ver un cierre», dijo Trump, pero agregó: «Si lo tuvieses, es culpa de los demócratas».
Los republicanos en el Congreso han mostrado poco interés por otro cierre luego de recibir fuertes críticas sobre la anterior. «Espero que decida firmarlo», dijo a los reporteros el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell.
Anteriormente, Trump amenazó con declarar una «emergencia nacional» si el Congreso no proporcionaba dinero específicamente para el muro, una acción bajo la cual podría redirigir otros fondos ya provistos en el presupuesto para pagar la construcción del muro. Sus colegas republicanos le han dicho a Trump que un paso semejante casi seguramente generaría oposición, tanto en el Congreso como en los tribunales.
Trump hizo del muro una promesa central de la campaña de 2016, calificándola como necesaria para combatir la inmigración ilegal y el narcotráfico. Dijo que México lo pagaría, pero los funcionarios mexicanos lo rechazaron. Los demócratas han llamado a un muro caro, ineficaz e inmoral.
Los demócratas se oponen al muro, pero apoyan los esfuerzos de seguridad fronteriza.
