VENEZUELA

El enviado especial de EE. UU. para Venezuela, Elliott Abrams, se reunió con representantes del Gobierno de Nicolás Maduro, dijo a periodistas el portavoz del Departamento de Estado, Robert Palladino.

«Estamos dedicados a la seguridad de nuestro personal en Venezuela y, como parte de eso, naturalmente debemos hablar con franqueza con los que tienen las armas, así que seguimos enfocados en la seguridad de nuestro personal en Venezuela», dijo Palladino ante la pregunta sobre reuniones entre Abrams y representantes de Maduro.

El portavoz añadió que «entiendo que ha habido una reunión».

Un vídeo publicado en la red social Twitter mostró a un grupo de uniformados que dice haber tomado desde aproximadamente las 5:00 de la madrugada hora local (9:00 GMT) un comando militar de la Guardia Nacional (componente del ejército) en el oeste de Caracas, específicamente en el sector de Cotiza.

«Venezuela aquí está unida para restablecer el hilo constitucional, ustedes querían esto, nosotros también, ¡ya!, ¡ya basta!», dijo a través de un vídeo colgado en Twitter un funcionario que se identificó como sargento mayor Figueroa.

Por su parte, la Defensa venezolana afirmó que los militares alzados en Caracas fueron «rendidos y capturados», y sus armas fueron incautadas. «Los delincuentes fueron rendidos y capturados en la sede de la unidad especial de seguridad de Waraira Repano, en Cotiza, municipio Libertador, también adscrita a la Guardia Nacional Bolivariana, a donde se habían dirigido, encontrando firme resistencia por parte de los oficiales y tropas profesionales allí acantonados», señala el texto de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.

El ministerio también aseguró en su comunicado que todas sus dependencias funcionan con normalidad tras el frustrado alzamiento de un grupo de militares en la madrugada, que atribuyó a «oscuros intereses de la extrema derecha».