INTERNACIONAL

La actividad de los republicanos disidentes ha aumentado recientemente en Irlanda del Norte como consecuencia del retorno de la frontera física con la República de Irlanda a causa de Brexit.
Y temerosos de un repunte de incidentes violentos para conmemorar el aniversario del Alzamiento de Pascua de 1916 contra el dominio británico, las autoridades ejecutaron una operación de búsqueda de armas y municiones en Creggan ─ubicada en el centro del territorio─ el jueves en la noche.
Esto provocó disturbios en esa zona de la ciudad conocida como Derry por los republicanos (Londonderry) , con más de 50 bombas incendiarias lanzadas contra la policía, que también vio como dos de sus vehículos eran incendiados.
«Creo que esto fue orquestado, orquestado hasta el punto que solo querían generar violencia y atacar a la policía», dijo el subcomisionado Hamilton.
Y un reportero que estaba en la escena describió como un hombre armado «dobló la esquina y comenzó a disparar indiscriminadamente contra los vehículos de la policía», lo que provocó la muerte de la periodista.
Según O´Neil, «el grupo acusado de matar a Lyra McKee es conocido como Nuevo IRA y estuvo detrás del ataque con bomba fuera del juzgado de la ciudad a inicios de año».
El Ejército Republicano Irlandés se desmovilizó oficialmente después de la firma del Acuerdo de Viernes Santo de 1998 que formalmente puso final al conflicto de Irlanda del Norte.
Dicho conflicto enfrentó a los protestantes partidarios de mantener al territorio como parte Reino Unido con los católicos partidarios de la independencia o de la integración de la provincia en la República de Irlanda.
El acuerdo, sin embargo, sentó las bases del actual gobierno, en el que católicos y protestantes comparten el poder, y puso fin a tres décadas de enfrentamientos que dejaron más de 3.000 muertos.
Pero el mismo también provocó varias escisiones en el IRA y en el bando republicano, actualmente liderado por el partido Sinn Féin.
De hecho, la vicepresidenta de esa organización política, Michelle O’Neill, se dijo «chocada y entristecida» por las noticias de la muerte de McKee y condenó «sin reservas a los responsables de haber matado a esta joven mujer».
