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La Alta Comisionada de la ONU para los derechos humanos pidió el lunes que los miembros de las familias de yihadistas capturados o muertos en Siria e Irak sean «repatriados a menos que sean investigados por crímenes».

En el inicio de la 41ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en Ginebra, Michelle Bachelet hizo un llamado a los Estados a repatriar a familiares de sus ciudadanos que lucharon en las filas del grupo Estado Islámico.

Además pidió que otorguen la nacionalidad «a los niños nacidos de sus ciudadanos» en las zonas de conflicto, ya que imponer el estatuto de apátrida a esos menores es un «acto de crueldad».

La Alta Comisionada de DD. HH. afirmó que los excombatientes del Estado Islámico detenidos en Siria e Irak, y sus familiares (que sumarían en total cerca de 55.000 personas) deben ser sometidos a un juicio justo, o bien ser liberados.

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