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Cerca de 500 piezas de armamento fueron recolectadas este sábado durante la jornada de trueque. El gobierno de Nueva Zelanda pretende retirar las armas de circulación tras el atentado de inspiración neonazi contra mezquitas que dejó 51 muertos en marzo.

Nueza Zelanda inicia el fin de semana con menos armas y material bélico en circulación porque decenas de personas empezaron a entregarlas a cambio de dinero en una de las mas de 250 operaciones de recolección prevista en todo el país.

Según el ministro de la Policía, Stuart Nash, el objetivo es «retirar de la circulación las armas más peligrosas». Este sábado al menos 169 personas entregaron un total de 224 armas y 217 piezas y accesorios, que luego fueron destruidos en una prensa hidráulica.

Los propietarios de armas semiautomáticas prohibidas recuperarán el 95% del precio base si son nuevas o casi nuevas, un 70% si están usadas, y un 25% si están en mal estado. Un gasto que el gobierno neozelandés está dispuesto a pagar para evitar que se repita una tragedia como la de marzo, en la que un atentado de inspiración neonazi contra mezquitas que dejó 51 muertos.

El gobierno, con el apoyo de partidos de oposición, adoptó rápidamente tras el ataque nuevas leyes sobre el control de armas.

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