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«América Latina y el Caribe debe promover alianzas para el desarrollo entre múltiples actores y sectores, así como en sus múltiples niveles: Norte-Sur, Sur-Sur, triangular y regional, entre otros», afirmó en su discurso inaugural José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), organismo de la ONU en cuya sede de Santiago se celebra el encuentro hasta el miércoles 31 de mayo.

Salazar-Xirinachs precisó que la región enfrenta un deterioro en sus condiciones económicas, sociales y de inversión y producción e instó a considerar «las vulnerabilidades propias de los países y subregiones para promover una respetuosa y adecuada cooperación y solidaridad regional» enfocada en un desarrollo «sostenible y resiliente», señala en un comunicado la CEPAL.

La directora de Cooperación Internacional del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de Costa Rica, Cristina Bolaños Argueta, calificó a esta primera reunión como «un hito regional histórico» en el ámbito de la cooperación, según la nota de la CEPAL, y subrayó que en momentos en que el mundo trata de lidiar con la amenaza que supone el cambio climático, la cooperación Sur-Sur y triangular «son más esenciales que nunca».

El Ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de Argentina, Santiago Cafiero, representante del país que asume la Presidencia de la Conferencia, reiteró que «al debilitarse los recursos destinados a la cooperación para los países de renta media, la solidaridad del sur global ha sido crucial», lo que fue reforzado por la subsecretaria de Relaciones Económicas Internacionales de Chile, Claudia Sanhueza, quien apuntó que es imprescindible fortalecer la institucionalidad en materia de cooperación para hacerla «más estratégica, colaborativa y eficaz».

La secretaria de Estado de Cooperación Internacional del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación de España, Pilar Cancela, destacó que la cooperación Sur-Sur se ha desarrollado de una manera muy amplia en América Latina y el Caribe gracias a la apuesta decidida de las instituciones por fortalecer los lazos entre los países.

Durante la Primera Reunión de la Conferencia Regional sobre Cooperación Sur-Sur los participantes analizarán los desafíos de la cooperación internacional para el desarrollo en el nuevo contexto mundial y alinearán posturas con miras a la Tercera Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y la Unión Europea, que se realizará del 17 al 18 de julio de 2023 en Bruselas, Bélgica.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe de Naciones Unidas (CEPAL) anunció que busca 4.400 millones de dólares para 28 proyectos a corto plazo en el sureste mexicano y en el Triángulo Norte de Centroamérica dentro de su Plan de Desarrollo Integral (PDI). «El desafío ahora es cómo logramos tener instrumentos flexibles para este financiamiento», reconoció la mexicana Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, en la XXXIII Reunión de Embajadores y Cónsules del Gobierno de México.

La funcionaria internacional presentó los avances del PDI para el norte de Centroamérica y el sureste mexicano, que se anunció en mayo de 2019 en el Palacio Nacional de México para atender «las causas» de la migración de la región. El plan contempla un total de 114 proyectos con un costo de 45.000 millones de dólares a cinco años, con 70% de los proyectos considerados «de inversión», detalló Bárcena.

Pero, ante el desafío de conseguir financiamiento, la Cepal ha identificado 32 proyectos de «implementación inmediata», incluyendo cuatro en México que ya tienen recursos propios. «Estamos nosotros en el diseño ya final para entregárselo a los gobiernos porque en el fondo Cepal hizo el diseño, pero los operadores serán otros. Y (hay que) reforzar la arquitectura de financiamiento, lo que nos falta es el sector privado, que nos demuestra ya su apoyo», indicó.

La región vive un flujo migratorio inédito, con más de 1,7 millones de indocumentados interceptados en la frontera con México en el año fiscal 2021 por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos. La funcionaria atribuyó el fenómeno a la pobreza y desigualdad, al citar la «tragedia» de que el 10 % de mayor ingreso en Centroamérica gane 70 veces más que el 10% de menor ingreso.

También resaltó que el «caso más dramático» es Honduras, donde un 58,6% de la población vive en la pobreza y hay una tasa de desempleo del 16%, por lo que los jóvenes entre 15 y 24 años son el grupo que más migra. Además, advirtió del impacto de la crisis climática, en particular en los cultivos de café de Honduras.

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