ARGENTINA

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Luego de las elecciones para gobernador del domingo en la provincia argentina de Córdoba, Martín Llaryora, del frente oficialista encabezado por el gobernador Juan Schiaretti, fue felicitado como ganador por políticos de casi todos los partidos.

Pero el candidato opositor Luis Juez de Juntos por el Cambio insistió en esperar hasta el final del conteo manual de votos bajo el argumento de que la diferencia era demasiado estrecha para celebrar o admitir la derrota.

Con el 82,06% de las mesas escrutadas, Llaryora, peronista moderada, obtuvo el 42,59% de los votos, seguida de Juez con el 40,05%.

Sobre las 02.00 horas del lunes y con el 90% del cómputo hecho, Llaryora salió a hablar tras ampliar su ventaja al 42,7% frente al 39,8%. «Los más perjudicados hoy somos todos los cordobeses y en especial los que deberíamos tener derecho a celebrar el esfuerzo que hemos hecho en esta campaña. Lamentablemente a estas alturas, en una provincia como la nuestra, deberíamos tener todos los resultados y no los tenemos», aseveró.

Un total de 3.048.677 cordobeses y unos 1.500 extranjeros estaban habilitados para votar. Al igual que sucedió en Chaco la semana anterior, la participación fue muy escasa. Se situó en alrededor del 60%, se informó.

Schiaretti, el actual gobernador, se postulará para presidente a finales de este año.

Mientras tanto, en Paraguay, limítrofe con Formosa, el titular Gildo Insfrán ganó con un 73,65 % frente a Francisco Paoltroni de Libertad, Trabajo y Progreso, quien obtuvo el 17,2 % de los votos. Fue la 7ª reelección de Insfrán. Es decir, ha sido electo Gobernador de Formosa por octava vez consecutiva.

El partido peronista gobernante de Argentina obtuvo fuertes victorias en las elecciones del domingo y parece tener el control de tres provincias apenas unos meses antes de las elecciones presidenciales en las que el apoyo al partido está decayendo.

El peronista Gustavo Sáenz fue reelegido como gobernador de la provincia de Salta, mientras que también se esperaba que los candidatos peronistas de las provincias de Tierra del Fuego y La Pampa fueran reelegidos en sus cargos.

Los resultados suponen un alivio para las filas del presidente Alberto Fernández, ya que la inestabilidad económica ha sacudido el control del partido sobre el país. Fernández ha dicho que no busca la reelección, sin embargo, una coalición peronista todavía apunta a mantenerse en el poder.

Argentina actualmente está luchando contra una crisis económica, con una pobreza creciente alimentada por una tasa de inflación anual superior al 100% y un peso débil.

El domingo temprano, el Ministerio de Economía anunció un paquete de medidas que incluyen ajustes de tasas, más intervenciones en el mercado cambiario y tratos acelerados con los acreedores.

Si bien el resultado es una buena noticia para el partido, su destino en las elecciones presidenciales probablemente se decidirá en las provincias más pobladas, como Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Mendoza.

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