ARGENTINA

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La compañía de transporte aéreo de bandera argentina, Aerolíneas Argentinas, suspenderá sus vuelos semanales a Cuba a partir del próximo 7 de marzo por, según la compañía, las pérdidas económicas que supone la ruta, que une Buenos Aires y La Habana con una conexión intermedia en Cancún (México).

Según confirmaron a EFE fuentes de Aerolíneas Argentinas, el tramo generó pérdidas de más de 500.000 dólares para la aerolínea en 2023.

«La cifra hubiera sido mayor si no estuviera en parte subsidiada por los buenos resultados de los vuelos Buenos Aires-Cancún, una de las rutas que aporta mayores ganancias a la compañía», especificaron esas mismas fuentes.

Con esta decisión, Aerolíneas Argentinas busca «proteger y potenciar a la compañía y a sus empleados», «fortalecer y priorizar los destinos que resultan más beneficiosos económicamente».

La suspensión de los vuelos con destino a La Habana, que estaban activos desde 2022, también servirá para que la aerolínea haga «eficientes» las horas de su tripulación de cabina, pilotos y tramos.

Además, Aerolíneas Argentinas pretende mejorar sus servicios con Cancún.

Según la compañía, los pasajeros que ya hubiesen comprado sus tiquetes para fechas posteriores al 7 de marzo serán reubicados en vuelos de otras compañías sin costos adicionales o se les reintegrará el valor total de los pasajes.

Aerolíneas Argentinas es la compañía más importante del país suramericano.

Sus aviones unen 66 destinos de Argentina y de otros países del resto de América y Europa.

Según los datos facilitados por la compañía en septiembre, la aerolínea transportó a 9 millones de pasajeros en 2023, aunque sus proyecciones apuntaban a cerrar el año superando el récord de casi 13 millones de viajeros de 2019.

El presidente argentino, Javier Milei, situó a Aerolíneas Argentinas en el listado de empresas públicas que propone privatizar.

El proyecto de ley «ómnibus» del presidente argentino Javier Milei, un amplio paquete de reformas que incluye desde aumentos de impuestos a privatizaciones, ha superado su primer obstáculo en el Congreso obteniendo luz verde de una comisión de la Cámara baja. Ahora enfrenta trabas aún mayores.

El proyecto de ley, parte de un impulso más grande para revivir la crítica economía del país, requerirá eventualmente aprobación en ambas cámaras del Congreso, donde la propia coalición libertaria de Milei cuenta con una minoría de bancas.

Es una parte destacada del plan de reforma de Milei desde que asumió el cargo el mes pasado, con el que busca reencauzar el futuro de la segunda economía de América Latina, que enfrenta una inflación superior al 200%, altos niveles de pobreza y una devastadora deuda pública.

Como parte del proyecto de ley, el Gobierno privatizaría una serie de empresas públicas ─aunque ha dado marcha atrás con la venta de la firma de energía estatal YPF─ e introduciría un amplio impuesto del 15% a la mayoría de las exportaciones, con las de soja y sus derivados trepando del 31% al 33%.

La extensa ley enfrenta un debate la semana próxima en la Cámara de Diputados, donde cuenta con el apoyo -usualmente con condiciones- de algunos bloques moderados y conservadores, mientras los sectores más izquierdistas generalmente se oponen.

La coalición de derecha de Milei solo tiene el 15% de las bancas en la Cámara baja y el 10% en el Senado, pero se ha aliado con la principal coalición conservadora y ha buscado incorporar a voces políticas diferentes en su gobierno.

«Muchos de nosotros tenemos la voluntad de acompañar al Gobierno y de ayudarlo en las reformas necesarias para sacar al país de esta crisis», dijo el diputado de la Unión Cívica Radical Martín Tetaz, según declaraciones hechas en el debate de comisión.

«Pero estamos convencidos de que esas reformas no pueden hacerse a expensas del ajuste a los jubilados, no pueden incluir aumentos de impuestos a la producción y, mucho menos, a las exportaciones», agregó.

El bloque peronista, la principal oposición de centroizquierda, fue más directo en sus planes de intentar derribar el proyecto de ley.

«La expresión de nuestro bloque va a ser de rechazo», dijo Germán Martínez, diputado del partido Unión por la Patria. «Es un gravísimo error darle más facultades a este presidente que quiere atropellar todo», agregó.

El diputado Santiago Santurio, del bloque La Libertad Avanza de Milei, dijo que el proyecto de ley «reconstruirá» Argentina, que enfrenta una galopante inflación, ahora superior al 200%, niveles de pobreza que han alcanzado el 40% y desbordantes deudas del Gobierno.

«Cada día más cerca de tener un país que salga del pozo en el que nos metieron y empiece el camino del crecimiento», dijo Santurio en su cuenta de X tras la aprobación del proyecto en la comisión de la Cámara de Diputados.

La legisladora de izquierda Myriam Bregman argumentó fuertemente en contra del proyecto de ley, del cual dijo que parecía haber sido escrito por «lobbies» empresariales y el Fondo Monetario Internacional (FMI), con el cual Argentina tiene un tambaleante programa por 44.000 millones de dólares.

«La Libertad Avanza no tiene los números para aprobar este mamarracho, solamente lo pueden hacer porque hay quienes colaboran con el desastre al que quieren llevar a nuestro país», concluyó Bregman. (agencias).

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