Salir de la emergencia, análisis político de Hugo Flombaum

OPINIÓN

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Foto: Dan DeLuca

Por Hugo Flombaum, analista político. Columnista de LaCity.com.ar.

Lectura: 6 minutos

Nuestro país ha vivido de emergencia en emergencia, muchas declaradas por ley otras resueltas con golpes militares, pero siempre la causa fue la crisis.

¿Es Argentina un país que debe vivir en crisis y resolverlas con emergencias? Definitivamente NO.

Entonces debemos buscar la causa.

Deberíamos hacer un esfuerzo para incluir nuestra historia en la búsqueda. No la reciente, la de nuestro origen, la que dio la conformación de nuestro territorio. En esa historia y como fue incidiendo en nuestro presente podríamos encontrar un diagnóstico más certero que el del déficit fiscal, inflación, moneda, gasto público, leyes laborales, etc.

Argentina tiene un diseño conformado desde su nacimiento. Un puerto y mercaderías que llegan de distintos puntos de nuestro territorio a ese centro y desde ahí nos relacionamos con el mundo. A ese puerto lo habitaron argentinos venidos de todo el país. Roca un tucumano, Sarmiento un Sanjuanino, por nombrar dos de los que afirmaron ese diseño.

Para modificar ese diseño se tomaron muchas medidas, pero que en lugar de cambiarlo lo afirmaron con malas consecuencias. La sustitución de importaciones terminó generando una oligarquía prebendaria que tomó el estado para su provecho.

El desarrollo no es algo que se logra con medidas monetarias ni con prebendas ocasionales. El desarrollo supone un movimiento social, educativo, de infraestructura que lo sustente.

No son medidas de coyuntura. Por ejemplo, en el comienzo del gobierno de Alfonsín se subsidiaron fuertemente a cinco provincias argentinas. El costo fiscal fue enorme, resultado ninguna de las provincias logró desarrollarse y además tuvimos que compensar a otra por los daños incurridos a su propio desarrollo.

Eran sin duda provincias que merecían el apoyo, ¿se hizo bien?, no, se hizo pésimamente mal.

Ahora estamos haciendo lo mismo con Tierra del Fuego, con un enorme costo fiscal y con un enorme perjuicio a los consumidores.

Cuando hablo de diseño no estoy hablando de subsidios estoy hablando de planes de desarrollo. Para lograrlo es necesario pensar en una nueva alianza política. En esa alianza dos provincias deben jugar un rol fundamental. En realidad, siempre lo jugaron. La provincia de Buenos Aires y la Provincia de Córdoba.

Volvamos a nuestra historia, esas dos provincias siempre estuvieron enfrentadas, quizás esa será una de la causa de nuestro fracaso. Desde el Virreinato, cuando expulsaron a los Jesuitas, verdaderos artífices de un desarrollo frustrado.

Buenos Aires se constituyó en la provincia productiva y más poblada de argentina desde su comienzo. Córdoba siempre se destacó por ser, desde el interior, la impulsora de un desarrollo más equilibrado, en lo económico y en lo territorial.

Compitieron, de esa competencia surgió una alianza tremendamente nociva. La del Interior contra Buenos Aires.

Aún hoy se escucha decir algo ridículo después de que el interior expulsó a sus habitantes para que se instalen en el conurbano bonaerense, indican a Buenos Aires como la culpable de los problemas.

Desde hace decena de años que los gobernadores de la Pcia. de Bs. As. intentan frenar la llegada de compatriotas del interior. Recuerdo al gobernador Cafiero cuando planteó que los puntos de coparticipación que cedió la provincia deberían ser aplicados al desarrollo de las provincias que poblaban el conurbano bonaerense.

En realidad, esos puntos de coparticipación lo único que lograron es un escandaloso crecimiento del empleo público y la expulsión de loa habitantes a las provincias productivas.

Si Córdoba y Buenos Aires se alían en la búsqueda de lograr el desarrollo de nuestro territorio junto a Santa Fe, Entre Ríos, Mendoza, y las provincias del norte de la Patagonia, lograríamos cambiar esa repartija estúpida de recursos por una más inteligente, que promueva el empleo privado y el desarrollo productivo.

Si Buenos Aires y Córdoba siguen compitiendo por liderar desde sus intereses al resto de las provincias, los únicos que ganan son los señores feudales que viven de esa competencia inútil.

Hoy se debate en el Congreso leyes claves para nuestro futuro. Si Córdoba planteara una coparticipación condicionada al crecimiento del empleo privado, posiblemente sería la base de un nuevo diseño de país.

Pero escucho al gobernador cordobés y a los dirigentes del fracaso, más preocupados de como rapiñar recursos que solo logran sostener el subdesarrollo que de generar un proceso virtuoso de progreso sustentable.

En este momento la Pcia. de Bs. As. se convirtió en el bastión del atraso. Su situación fiscal es alarmante. Pero su situación política es más preocupante. A diferencia del Congreso de la Nación la legislatura provincial acompaña con silencio y complicidad el suicidio provincial.

En ese marco, Kicillof recordó que «la provincia de Buenos Aires aporta el 40% de los recursos y recibe el 20», aunque aclaró que no va a reclamar «ese 40% porque es un país federal, es un país solidario. No es el enfoque adecuado».

El gobernador vuelve a cometer el mismo error que todos los antecesores, él está disculpado, nunca vivió en la provincia. La única manera de ser presidente es ser un gobernador que defiende su provincia, no alguien que la entrega para beneplácito de los señores feudales que se benefician con el dinero de los bonaerenses.

Tenemos una oportunidad, la masa de dinero no se puede seguir distribuyendo como en los últimos 35 años, las pruebas del fracaso están a la vista, para que ese cambio se de necesitamos romper la lógica Interior vs. Buenos Aires y cambiarla por Desarrollo vs Subdesarrollo.

Hoy Córdoba podría liderar un proyecto de nación, pero en alianza con un proyecto en consonancia con la provincia de Bs. As. Lo que se observa es que ha decidido continuar con la ruta que no permitió que dos dirigentes de nota como De La Sota y Schiaretti pudieran liderar a la nación.

Deberíamos intentar por primera vez en nuestra historia elaborar una alianza para el desarrollo entre las provincias productivas que elaboren un plan para desarrollar al resto del territorio.

Si no lo logramos hablaremos de déficit, inflación, moneda y gasto, en lugar de hablar de educación, desarrollo y producción.

Otro artículo escrito por Hugo Flombaum: Vista al frente

Un comentario en “Salir de la emergencia, análisis político de Hugo Flombaum

  1. ALGO DE HAY DE LO QUE DICE EL AUTOR DE LA NOTA. PEO ME PERMITO AGREGAR QUE NO ES PRECISAMENTE ESE MODELO QUE PROPONE (AUNQUE MUCHO PUEDE AYUDAR) LA SOLUCIÓN DEL PROBLEMA. ESTO ES MUCHO MÁS PROFUNDO Y NO ALCANZA CON UNA CONCERTACIÓN DE DOS PROVINCIAS POR MÁS PODEROSAS QUE FUEREN, NI TAMPOCO ELIMINANDO LA CONTROVERSIA BUENOS AIRES – INTERIOR. HAY OTROS FACTORES MUCHÍSIMOS MÁS IMPORTANTES QUE, SI SE REVIERTEN, BIEN PODRÍAN SER LAS CAUSANTES DEL DESARROLLO DE LA NACIÓN EN SU CONJUNTO. COMO DICE EL DICHO: LE DEJO PICANDO LA PELOTA. GRACIAS.

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