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La gobernadora de la Reserva Federal Adriana Kugler dijo el viernes que ve el elusivo «aterrizaje suave» de la caída de la inflación en medio de un mercado laboral saludable al alcance de la economía estadounidense, señalando que las expectativas de inflación siguen ancladas y que la Fed ha evitado una espiral de salarios y precios.

«Soy cautelosamente optimista en cuanto a que veremos un progreso continuo en la desinflación sin un deterioro significativo del mercado laboral», dijo Kugler en declaraciones preparadas para la cumbre económica anual del Instituto de Investigación de Política Económica de Stanford.

En particular, Kugler no expuso sus expectativas sobre cuándo o con qué rapidez la Reserva Federal debería recortar su tasa de política monetaria, que aumentó rápidamente en 2022-2023 y se ha mantenido en el rango de 5,25% a 5,5% desde julio pasado.

Pero dijo que su optimismo surge de la rapidez con la que los aumentos de las tasas de interés de la Reserva Federal y la reversión de los shocks de oferta que contribuyeron a aliviar las presiones sobre los precios incluso cuando el mercado laboral se mantuvo fuerte.

La inflación se disparó después de la pandemia debido a restricciones agudas y rápidas en la oferta tanto de bienes como de mano de obra, a las que las empresas no pudieron adaptarse rápidamente, señaló. Pero ha caído casi con la misma rapidez, cuando el año pasado se recuperó la oferta tanto de trabajadores como de bienes.

Como resultado, el crecimiento de los salarios se desaceleró, señaló, lo que probablemente puso fin a la amenaza de una espiral de salarios y precios que podría haber permitido que la inflación se afianzara.

Mientras tanto, las expectativas de inflación se han mantenido ancladas, y las empresas ajustan los precios con menos frecuencia que en el punto álgido del aumento de la inflación, una señal, dijo, de un enfriamiento de la inflación.

Con un 3,7%, la tasa de desempleo de Estados Unidos es sólo unas décimas más alta que cuando la Reserva Federal comenzó a subir las tasas en marzo de 2022. Mientras tanto, la tasa de inflación según la medida objetivo de la Reserva Federal ha bajado 4,5 puntos porcentuales, hasta el 2,4% en su lectura más reciente.

Wall Street arrancó marzo en modo volátil, con sus principales indicadores bailando entre el color rojo y el verde, después de haber cerrado el jueves cuatro meses seguidos de subidas y de que el Nasdaq firmó el mejor mes en dos años.

Dos minutos después de la apertura del parqué, el Dow Jones perdía un leve 0,01 % y se situaba en 39.040 puntos, aunque en los compases previos había registrado pequeños aumentos.

Del mismo modo variable, el selectivo S&P 500 subía un 0,12 %, a 5.110 unidades, y el tecnológico Nasdaq crecía un 0,18 %, a 16.121 enteros.

Los mercados encaran este marzo con la vista puesta en el rumbo de la inflación y las consiguientes medidas de la Reserva Federal (Fed) sobre una posible baja de los tipos de interés.

El jueves se conoció el índice de precios en gastos de consumo personal (PCE, en inglés), un dato clave que guía la política monetaria de la Reserva Federal, que marcó en enero un alza del 2,4 % interanual, según la Oficina de Estadísticas Económicas (BEA).

Este dato muestra una disminución de dos décimas en relación con el PCE interanual de diciembre.

También el jueves se dio a conocer la cifra semanal de nuevas solicitudes de subsidio por desempleo, que la semana pasada fue de 215.000, es decir, 13.000 más que en el dato ajustado de la anterior, según la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, en inglés), otro dato que suele servir de termómetro sobre la salud de la economía estadounidense.

Por sectores, destacaba la caída de los servicios públicos (-1,62 %) y de los bienes esenciales (-0,57 %), mientras que los que mostraban mejor cara eran el energético (1,11 %) y el tecnológico (0,37 %).

Entre los 30 valores del Dow Jones no había grandes movimientos este viernes, con casi todas las compañías mostrando leves variaciones menores de un punto porcentual, con excepción de United Health (-2,59 %), Nike (-1,45 %) y Honeywell (-1,06 %).

También destacaba la caída de más de un 25 % de las acciones del banco regional estadounidense NYCB después de que la entidad anunciara un problema de «controles internos» y el cambio de su director ejecutivo.

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