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La agencia de ciberinteligencia de Australia emitió el martes una inusual advertencia sobre la creciente amenaza de los piratas informáticos chinos respaldados por el Estado, diciendo que estaban buscando «activamente» objetivos para comprometer.

La Dirección de Señales de Australia destacó al grupo de piratería APT40 en un informe técnico de asesoramiento sobre la evolución de hackeos.

«APT40 ha apuntado repetidamente a redes australianas así como a redes gubernamentales y del sector privado en la región, y continúa la amenaza que representan para nuestras redes», decía el informe.

La Dirección de Señales de Australia dijo que APT40, que significa Amenaza Persistente Avanzada, llevó a cabo «operaciones cibernéticas maliciosas» para una rama del Ministerio de Seguridad del Estado de China con sede en la provincia de Hainan.

La dirección dijo que APT40 buscaba infiltrarse en dispositivos viejos y olvidados que todavía estaban conectados a redes informáticas sensibles.

Utilizando estas computadoras para ganar un «punto de apoyo» no detectado, pudieron explotar «rápidamente» vulnerabilidades y saquear información.

«APT40 está realizando activamente reconocimientos regulares contra redes de interés en Australia, buscando oportunidades para comprometer sus objetivos», dijo la Dirección de Señales de Australia.

La atribución de ciberataques sofisticados es técnicamente difícil y políticamente complicada, y conlleva el riesgo de enojar a China.

«En nuestras circunstancias estratégicas actuales, estas atribuciones son herramientas cada vez más importantes para disuadir la actividad cibernética maliciosa», afirmó el ministro de Defensa australiano, Richard Marles.

La nota de asesoramiento fue coautora con aportes de Estados Unidos, el Reino Unido, Alemania, Japón, Corea del Sur y otros socios internacionales.

Los expertos en ciberseguridad han dicho que las salvaguardias inadecuadas y el almacenamiento de información confidencial de los clientes han convertido a Australia en un objetivo para los piratas informáticos.

Los principales puertos que manejan el 40 por ciento del comercio de carga de Australia se paralizaron a principios de este año después de que piratas informáticos se infiltraran en las computadoras del operador DP World.

En 2022, piratas informáticos con sede en Rusia violaron una de las aseguradoras de salud privadas más grandes de Australia y accedieron a los datos de más de nueve millones de clientes actuales y anteriores.

En septiembre de 2022, la empresa de telecomunicaciones Optus fue víctima de una filtración de datos de magnitud similar en la que se accedió a los datos personales de hasta 9,8 millones de personas.

A principios de este año, el gobierno de Nueva Zelanda culpó a APT40 por un ciberataque de 2021 que se infiltró en su red informática parlamentaria.

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