Problemas en Francia para titular de Telegram

INTERNACIONAL

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Foto: Yuri Samoilov

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La Justicia francesa imputó este miércoles al fundador de la plataforma de mensajería Telegram, el ruso Pavel Durov, por cargos que van desde el blanqueamiento de crímenes a complicidad en la difusión de imágenes pedófilas y ordenó que ─tras cuatro días arrestado─ quede en libertad, pero bajo control judicial.

Durov, de 39 años, fue detenido el sábado en el aeropuerto Le Bourget, en las afueras de París, y fue interrogado en los siguientes días. Para lograr su libertad vigilada debió pagar una fianza de cinco millones de euros. Ahora tiene prohibido abandonar Francia y debe reportarse dos veces a la semana en una estación policial.

Los cargos en su contra se refiere a presuntos delitos que involucran a un grupo organizado, incluida la «complicidad en la administración de una plataforma en línea para permitir una transacción ilícita». Además, se le acusa de no haber compartido documentos exigidos por las autoridades, así como de «difusión en un grupo organizado de imágenes de pornografía infantil», tráfico de drogas, fraude y lavado de dinero.

Por si fuera poco, la Justicia abrió una causa por supuestos «actos de violencia» en contra de uno de sus hijos, mientras él y su expareja, la madre del niño, se encontraban en París. La mujer además presentó el año pasado una denuncia contra Durov en Suiza, donde actualmente vive también el menor, reveló una fuente a la agencia de noticias AFP.

La nueva investigación confiada a la agencia francesa de prevención de la violencia contra los menores, Ofmin, acaba de abrirse. Según la fiscalía de París, la investigación permitirá realizar comprobaciones con Suiza para saber si «ya existe un marco judicial» en este país sobre estos hechos. Si es así, la justicia francesa no reemplazará a la suiza, según una fuente próxima al caso.

El abogado de Durov, en tanto, dijo que era «absurdo» pretender acusar a su defendido de los crímenes cometidos en Telegram.

El inesperado arresto del ruso Pavel Durov en Francia ha provocado una ola de indignación a través de su aplicación de mensajería Telegram, que cuenta con más de 900 millones de usuarios activos.

El multimillonario creó la aplicación junto con su hermano mayor, el talentoso matemático y programador Nikolai Durov. Juntos construyeron la reputación de la plataforma en materia de privacidad al establecer capas de protección de datos y desafiar repetidamente a los actores estatales que solicitaron acceso. Al mismo tiempo, los críticos de Telegram la describen como una aplicación del «salvaje oeste», donde la desinformación y la propaganda se difunden con poca o ninguna supervisión.

Es sólo uno de los proyectos lanzados por Pavel Durov, a quien a menudo se describe como «el Mark Zuckerberg ruso».

Pavel Durov nació en San Petersburgo, en la ex Unión Soviética, en 1984. Sus padres eran profesores de la Universidad Estatal de San Petersburgo. Cuando Durov tenía cuatro años, su familia se mudó a Italia y pasó allí cuatro años. Durov comenzó la escuela primaria en Turín.

En 1992, su familia regresó a San Petersburgo y su padre asumió la dirección del departamento de Lenguas Clásicas en la Facultad de Filología de la Universidad Estatal. Durov continuó su educación en Rusia. En la escuela secundaria incursionó en la programación, y más tarde, durante sus estudios de Inglés en la universidad, creó una biblioteca digital llamada Durov.com y un foro para estudiantes en internet. Durov admitió más tarde que creó diferentes cuentas en línea y discutió consigo mismo en su foro para impulsar el debate.

Mientras completaba sus estudios y obtenía el título de traductor de inglés en 2006, el futuro multimillonario tecnológico también se centró en la creación de una red social inspirada en Mark Zuckerberg, quien lanzó The Facebook en 2004. La propia plataforma de Durov, VKontakte (En contacto), estaba en funcionamiento a finales de 2006. Fue respaldada en parte por fondos obtenidos a través del compañero de curso y socio comercial de Durov, Vyacheslav Mirilashvili, hijo del polémico empresario Mikhael Mirilashvili.

La plataforma alcanzó los 3 millones de usuarios en 2007 y continuó expandiéndose, consolidando pronto una posición dominante en Europa del Este. Pero VKontakte era más que una imitación de Facebook: permitía subir y transmitir todo tipo de streaming: videos y películas.

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