OPINIÓN

*_{Escribe Mariana Gonzalez, especialista en Computación Científica, Fac. Ciencias Exactas UBA. MBA, ITBA.}

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La carrera por la miniaturización de los componentes de los procesadores, la ampliación de su capacidad de cálculo, la baja de costos de fabricación, la mayor eficiencia energética… parecía frenada. Los «chips» estaban llegando a su límite.

Los chips son circuitos integrados, en una placa de milímetros cuadrados de superficie, generalmente de silicio (material semiconductor), que incluye transistores, condensadores, y otros componentes. Son el corazón de todos los dispositivos electrónicos. Proporcionan la capacidad de procesamiento de la información.

Se usan desde pequeños chips, de dimensiones milimétricas, que se implantan bajo la piel de las mascotas, hasta chips para inteligencia artificial, que son a escalas nanométricas (o sea trabajar en la dimensión del átomo) y de altísima precisión; además de su uso en instrumental médico, autopartes, computadoras, robots, electrodomésticos, aplicaciones militares, etc.

Samsung ─multinacional con sede en Corea del Sur─, INTEL ─estadounidense─, TSMC ─empresa de Taiwan, la mayor fabricante de chips del mundo─, NVIDIA ─empresa estadounidense de propiedad de un taiwanés─ , Xilinx ─estadounidense─, Micron ─multinacional con sede en Estados Unidos─, ASML ─empresa neerlandesa─, Broadcom ─estadounidense─ son algunos de los mayores compañías fabricantes de chips.

Las empresas chinas fabrican chips, pero, las restricciones impuestas por la legislación estadounidense, en octubre de 2022, que prohíben vender a China tecnologías para construir chips de nuevas generaciones, les hace casi imposible fabricar productos más avanzados.

Y llegaron los chiplets!

Los chiplets, explicado de una manera muy sencilla, son semiconductores más simple, que pueden contener distintos elementos que hacen a las funciones de los procesadores, con capacidad de interconexión entre ellos para funcionar como si fueran un solo chip. En vez de un procesador muy complejo con todos los componentes en un circuito integrado, se los separa en unidades individuales más sencillas.

Sin embargo, no es tan simple, los diseñadores de chiplets tienen que resolver problemáticas complejas: el nivel de integración y de interconexión, para que todos puedan compartir recursos en forma eficiente, sincronizadamente y con alimentación energética común.

Los chiplets le dieron a China la salida para eludir las prohibiciones a la importación desde Estados Unidos y poder intentar estar, nuevamente, en la lista de los grandes productores.

El gobierno chino ha puesto a la fabricación de chiplets como prioritario, a lo que se le han sumado inversores de capital de riesgo. Se incentiva a los académicos chinos para el desarrollo de los componentes necesarios para esa tecnología y empresas como Polar Bear Tech, ya ha fabricado sus primeros productos.

MIT Technology Review eligió los chiplets como una de las 10 Tecnologías Innovadoras de 2024.

Seguimos adelante en avanzar en el desarrollo de super procesadores (el cerebro) y en la inteligencia artificial (el intelecto) para crear a la persona artificial.

*_{Mariana Gonzalez
Computación Científica, Fac. Ciencias Exactas UBA
MBA ITBA
Empresaria en Argentina y Uruguay en empresas de tecnología.}

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