Apoyo del BID al gobierno de Milei

ARGENTINA

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Ilan Goldfajn, presidente del BID / Foto: Casa de América

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El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) otorgará a Argentina préstamos por US$ 3.800 millones. Según Ilan Goldfajn, presidente del BID, se destinarán US$ 2.400 millones al sector público y US$ 1.400 millones a proyectos privados en los próximos dos años.

Estas iniciativas buscan impulsar el crecimiento del país mediante una colaboración entre el sector público y privado.

Goldfajn, expresidente del Banco Central de Brasil, afirmó que Argentina necesita un sector público más eficiente y un sector privado dinámico para superar sus crisis económicas recurrentes.

«Las reformas ayudarán a Argentina a liberarse de su historia», enfatizó en un artículo publicado en Financial Times.

Goldfajn destacó que el gobierno de Javier Milei ha dado pasos importantes para restaurar el equilibrio fiscal del país.

En solo siete meses, Argentina pasó de un déficit del 2,9% del PBI a un superávit del 1,5% en agosto de 2024. Este avance fue posible gracias a medidas como la reducción de subsidios, recortes en salarios públicos y transferencias a las provincias, junto con aumentos en las tarifas y la recaudación de impuestos.

Sin embargo, para mantener esta senda, Goldfajn advirtió que el gasto público debe ser más eficiente y equitativo. Según un estudio del BID, hasta un 7% del PBI puede ser reasignado, con ineficiencias que llegan al 3,3% del PBI en subsidios y transferencias.

El BID está trabajando estrechamente con el gobierno argentino para mejorar la eficiencia del gasto público y fortalecer la protección social.

Sin embargo, este es solo un aspecto del camino hacia el crecimiento económico sostenible. El objetivo, según Goldfajn, es crear oportunidades laborales y un desarrollo duradero.

Para alcanzar este objetivo, la colaboración entre un sector público comprometido y un sector privado vibrante es clave.

Goldfajn subraya que Argentina debe ofrecer incentivos claros para la innovación, la creación de empleo y el financiamiento que aumente la productividad.

Goldfajn mencionó que Argentina tiene un rol crucial en la seguridad alimentaria global, siendo un importante exportador de soja, maíz y litio. Estos recursos, junto con un marco regulatorio eficiente, posicionan al país como un actor clave en la transición energética y en las cadenas de suministro de minerales críticos.

El BID destinará USD 2.400 millones en créditos al Estado argentino, enfocándose en mejorar la eficiencia del sistema tributario y del gasto público.

Además, se financiarán USD 1.400 millones en proyectos privados relacionados con agronegocios, infraestructura, energía y minería, destacando tres proyectos importantes de litio y cobre en la provincia de Salta.

Goldfajn concluyó que el futuro económico de Argentina depende de una interacción efectiva entre un sector privado audaz y un sector público regulador.

Esta combinación permitirá crear un ciclo de crecimiento sostenido. «El pasado no tiene por qué ser prólogo para Argentina», finalizó.

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