ARGENTINA

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El presidente Javier Milei advirtió este martes que vetará todas las leyes que afecten el equilibrio fiscal, en alusión a los proyectos aprobados por el Senado, entre ellos el que establece un nuevo cálculo de movilidad jubilatoria. Además, aseguró que, en caso de que el Congreso insista, el Gobierno judicializará la norma para frenar su aplicación.

«Todos saben lo que voy a hacer. Vamos a vetar. Y si se cae el veto, lo vamos a judicializar», sostuvo el mandatario durante su discurso en el acto por el aniversario de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, al que asistieron ministros, empresarios y dirigentes. «Si la Justicia decidiera actuar con celeridad, el daño sería mínimo. Una mancha de dos meses que vamos a revertir el 11 de diciembre», subrayó.

«La macro es nuestro chaleco de seguridad»

A tono con su estilo confrontativo, Milei aseguró que los sectores políticos que promueven estas leyes están «desesperados porque saben que en octubre La Libertad arrasa». En ese sentido, relativizó las presiones políticas: «Los puñales existen, pero la macro es un chaleco de seguridad».

Reafirmó que el equilibrio fiscal no es negociable. «La política del superávit fiscal es permanente. No es un ajuste, es la única manera de estabilizar la economía», afirmó. Según destacó, Argentina tuvo una recuperación rápida tras el shock inicial del ajuste: «Nos expandimos 5,7% en el primer trimestre y vamos a cerrar el segundo con un crecimiento del 7,5% u 8% interanual».

Milei defendió su gestión económica al asegurar que, pese a las críticas, el plan está dando resultados. «Sacamos de la pobreza a 11 millones de argentinos desde aquel fatídico 54%», señaló, en alusión al pico de pobreza previo a su mandato.

Por su parte, Adelmo Gabbi, presidente de la Bolsa de Comercio, elogió la gestión libertaria y celebró que «se está ganando la batalla cultural contra el intervencionismo y los controles». «Tuve que esperar a la última etapa de mi vida para ver a mi país con 18 meses de superávit fiscal», sostuvo visiblemente emocionado.

El acto contó con la presencia del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y de ministros clave como Luis Caputo, Patricia Bullrich, Sandra Pettovello y Federico Sturzenegger, así como de representantes del empresariado como Horacio Marín (YPF) y Nicolás Pino (Sociedad Rural).

En una sesión ilegal, impulsada por el kirchnerismo y sectores opositores, el Senado de la Nación sancionó este jueves un paquete de leyes que destruye el superávit fiscal alcanzado por el Gobierno de Javier Milei.

Las iniciativas fueron aprobadas en el marco de una jornada que violó abiertamente el reglamento interno de la Cámara Alta y sin el quórum calificado exigido por ley, representando un intento de golpe institucional del kirchnerismo.

Las iniciativas sancionadas incluyen el aumento generalizado de las jubilaciones, la reactivación de la moratoria previsional, la declaración de la emergencia en discapacidad, y la creación de un Fondo de Emergencia por las inundaciones en Bahía Blanca.

Según el Ministerio de Economía, el costo fiscal de estas medidas representa un impacto combinado de hasta 2,5 puntos del Producto Bruto Interno (PBI), lo que haría inviable el compromiso de déficit cero que sostiene la administración libertaria.

La gravedad de lo ocurrido no radica únicamente en el contenido económico de las leyes, sino en la ilegalidad del procedimiento parlamentario utilizado. La sesión fue convocada sin la firma de la presidente del Senado, Victoria Villarruel, condición indispensable para su validez. Además, las iniciativas tratadas requerían quórum especial de dos tercios, algo que no fue alcanzado. Además, pese a los reclamos, Villarruel decidió no levantar la sesión, siendo cómplice del kirchnerismo.

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