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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio el viernes (21.11.2025) un ultimátum al mandatario ucraniano, Volodímir Zelenski, para que acepte antes del próximo jueves 27 de noviembre, Día de Acción de Gracias, el plan de paz propuesto por la Casa Blanca para poner fin a la guerra de Ucrania.
«Si las cosas funcionan bien, se pueden prorrogar los plazos. Pero el jueves es el día que consideramos oportuno», declaró el mandatario en una entrevista con la emisora Fox Radio.
Trump hizo estas declaraciones después de que el diario The Washington Post publicara, citando fuentes familiarizadas, que la Casa Blanca ha puesto como ultimátum a Zelenski el próximo Día de Acción de Gracias para que acepte el plan o, de lo contrario, perderá el apoyo de Estados Unidos.
Preguntado en la entrevista sobre el plan, que implicaría que Ucrania cediera territorio a Rusia, el mandatario republicano subrayó que Kiev ya «está perdiendo territorio» con la guerra, un conflicto que dijo está «fuera de control, es una masacre».
Sobre la posibilidad de que el presidente ruso, Vladímir Putin, decida atacar en el futuro a otros países europeos, Trump se mostró convencido de que el jefe del Kremlin «no busca más problemas», y que ha aprendido la lección de una guerra «que debería haber durado un día y lleva cuatro años», subrayó.
Recordó además la entrada en vigor este viernes de las nuevas sanciones estadounidenses contra las dos mayores petroleras rusas, Rosneft y Lukoil, que calificó de «muy poderosas».
El plan de 28 puntos de Trump para Ucrania, filtrado a medios estadounidenses, incluye líneas rojas para Kiev, como la reducción de su Ejército a un máximo de 600.000 efectivos o la cesión a Rusia de territorios que no han sido conquistado militarmente por Moscú.
Aunque según las filtraciones el plan fue negociado entre Estados Unidos y Rusia, la Casa Blanca sostiene que ha conversado «por igual» con Ucrania.
Zelenski: «No traicionaré» a Ucrania
Este mismo viernes, Zelenski acordó con sus socios europeos coordinar posiciones para negociar con Estados Unidos el documento presentado por Washington como punto de partida.
En un mensaje a la nación, el mandatario ucraniano advirtió que el país se enfrenta a «elecciones muy difíciles» que podrían entrañar el riesgo de perder a un aliado clave como es Washington.
Sin embargo, dijo, las propuestas estadounidenses auguran «una vida sin libertad, sin dignidad, sin justicia. Y creer a alguien que ya ha atacado dos veces», insistió Zelenski en referencia a Rusia, que lanzó su invasión de Ucrania en febrero de 2022 y anexionó la península de Crimea en 2014.
«Presentaré argumentos, persuadiré, propondré alternativas», declaró el presidente ucraniano, asegurando que no «traicionará» a su país.
Poco después, Zelenski habló por teléfono sobre el plan con el vicepresidente estadounidense JD Vance, indicó una fuente de la presidencia en Kiev.
Después de esa conversación, anunció que Ucrania colaboraría con Estados Unidos y Europa «a nivel de asesores» para elaborar un plan de paz
«Acordamos trabajar juntos con Estados Unidos y Europa a nivel de asesores de seguridad nacional para que el camino hacia la paz sea realmente factible», declaró en X tras la llamada, que duró casi una hora.
«Ucrania siempre ha respetado y sigue respetando el deseo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de poner fin al derramamiento de sangre y consideramos positivamente todas las propuestas realistas», añadió.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, desató polémica este fin de semana al afirmar que había planes «bastante precisos» para un eventual despliegue de tropas europeas en Ucrania como parte de las garantías de seguridad posconflicto en aquel país.
«Tenemos una hoja de ruta clara y alcanzamos un acuerdo [sobre la ayuda estadounidense] en la Casa Blanca (…) y este trabajo avanza muy bien», dijo en una entrevista con el Financial Times publicada el domingo, 31 de agosto de 2025.
Las palabras han causado sorpresa, ya que, hasta ahora, los detalles sobre un posible despliegue militar son muy difusos. La reacción de varios Estados miembros no se hizo esperar, incluida Alemania. «Esas son cosas de las que no se habla antes de sentarse a la mesa de negociación con todos los actores involucrados», advirtió el ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius.
Entonces, ¿qué cabe interpretar de las palabras de Von der Leyen? ¿Ofreció la presidenta de la CE alguna pista sobre los planes futuros de la UE en Ucrania?
Una señal política
Para Guntram Wolff, investigador del centro de estudios Bruegel, en Bruselas, las declaraciones de Von der Leyen buscan enviar un mensaje a los países del este de Europa, preocupados por una posible futura ofensiva rusa. «Es claramente una señal política. Ella está en Europa del Este, visitando bases militares, y habló del posible despliegue de tropas en Ucrania», explicó. «Es un mensaje de apoyo a esos países».
Sin embargo, los detalles de un eventual envío de tropas europeas o de un respaldo estadounidense siguen siendo muy vagos.
Ian Lesser, director de la oficina en Bruselas del German Marshall Fund, considera que llamar «bastante precisos» a los planes resulta, en realidad, «muy impreciso». Según él, lo máximo que podría esperarse de Washington por ahora es «más de lo mismo»: apoyo en inteligencia o logística, pero no soldados en suelo ucraniano ni cobertura aérea que implique un compromiso militar directo en caso de ataques rusos a tropas europeas.
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