ARGENTINA

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El Gobierno de Javier Milei trabaja en una nueva etapa del plan de reducción del Estado, con el objetivo de reducir de manera más profunda la estructura estatal durante 2026, y así poder seguir bajando impuestos.

Tras la reciente reorganización, el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, y el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, coordinan la estrategia con la que buscarán avanzar sobre distintos organismos del Estado. «La motosierra es constante», aseguraron desde Casa Rosada.

Aunque en el Gobierno evitaron precisar cuántos estatales podrían verse involucrados en esta nueva fase, dejaron trascender que la reducción abarcaría «otro 10%», lo que implicaría un recorte de gran escala sobre la dotación actual. La administración libertaria ya lleva adelante un monitoreo mensual para evaluar funciones, estructuras y contratos, con instrucciones directas del presidente Javier Milei de «lograr un Estado más eficiente».

Sturzenegger, quien publica mensualmente en su cuenta de X el detalle de las bajas en el sector público, prepara un nuevo informe correspondiente a octubre. Según los datos difundidos hasta septiembre, la reducción de estatales, especialmente de ñoquis kirchneristas y empleados militantes, desde el inicio de la gestión suman 58.797, incluyendo personal de organismos centralizados y descentralizados, fuerzas de seguridad, personal militar y empleados de empresas estatales.

A la vez, un informe del INDEC publicado el último viernes mostró que la dotación de la administración pública nacional, las empresas del Estado y las sociedades estatales se redujo 0,3% en octubre. El organismo reveló que actualmente hay 282.570 empleados en esos ámbitos, número que el Gobierno de Milei busca disminuir en los próximos meses.

En los primeros dos años de gestión, el Ejecutivo concentró los ajustes principalmente en la administración centralizada. Ahora, el enfoque se trasladará hacia los organismos descentralizados, un conjunto amplio que incluye a la ARCA, ANMAT, CONICET, INDEC, ANSES, ENARGAS, INTA, INTI, ENACOM, entre otros. En estas estructuras, sostienen fuentes oficiales, existe margen para profundizar la reorganización administrativa y continuar recortando gasto.

La próxima ola de reducciones podría comenzar en diciembre, cuando vence una gran cantidad de contratos que no tendrían renovación. Además, parte de los futuros recortes se vinculará con los planes de eliminación de los registros automotores y con los proyectos de privatización de empresas públicas que el Poder Ejecutivo continúa evaluando.

Las medidas, señalan en la Casa Rosada, serán «inminentes» y se desplegarán durante los dos primeros trimestres de 2026, en un contexto donde el Gobierno insiste en que la reducción del Estado es una condición indispensable para seguir bajando el gasto público y los impuestos para todos los argentinos.

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