Trump bloquea buques petroleros

INTERNACIONAL

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Foto: U.S. Navy photo by Mass Communication Specialist Seaman Angel Campbell

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El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció este martes (16.12.2025) un bloqueo naval de los «buques petroleros sancionados» que salgan o se dirijan a Venezuela, en una nueva escalada de su campaña de presión sobre el régimen de Nicolás Maduro.

«Hoy ordeno un bloqueo total y completo de todos los petroleros sancionados que entren y salgan de Venezuela», escribió Trump en sus redes sociales, días después de que fuerzas estadounidenses incautaran un petrolero frente a la costa venezolana.

«El régimen ilegítimo de Maduro está utilizando el petróleo de estos yacimientos petrolíferos robados para financiarse, el narcoterrorismo, la trata de personas, el asesinato y el secuestro», acusó el republicano en su mensaje en Truth Social.

Trump también dijo que la flota estadounidense concentrada en el Caribe «solo seguirá creciendo» hasta que Venezuela devuelva «a los Estados Unidos de América todo el petróleo, la tierra y otros activos que anteriormente nos robaron».

Asalto y decomiso de buque

Washington sacudió al mercado petrolero el pasado 10 de diciembre al asaltar y decomisar un buque cisterna que estaba sancionado por el Departamento del Tesoro, y que acababa de salir de Venezuela cargado de petróleo.

Estados Unidos se quedó con el buque y el crudo, lo que fue calificado por el gobierno del presidente Nicolás Maduro de «robo descarado».

Paralelamente Washington anunció sanciones contra seis empresas del sector de transporte de crudo y seis buques cisterna.

Aislada internacionalmente, Venezuela se ve obligada a utilizar esos buques «fantasma», que cargan crudo venezolano a un precio muuy inferior al del mercado, para poder colocarlo esquivando las sanciones financieras en su contra.

Bloqueo metería en dificultades a Caracas

Un bloqueo de sus puertos al tráfico petrolero significaría enormes dificultades para el régimen, coinciden los analistas.

La inclusión de esas navieras y buques directamente en una lista de sanciones «es un escalamiento muy significativo», declaró a la AFP Francisco Monaldi, director del Programa de Energía de América Latina del Instituto Baker (Texas), cuando se produjo ese anuncio.

Esos seis buques se hallaban en puertos venezolanos cuando se conoció la medida, detalló el experto. «Están esperando a que [cada buque] salga del país para detenerlo», explicó.

«Eso, combinado con que quizás algunos barcos literalmente dicen «no vuelvo a Venezuela», pueden llevar a que haya una caída tanto del precio como del volumen exportado. Si además cae la exportación, el problema que tiene Venezuela es que no tiene mucha capacidad de almacenar crudo. Entonces, tiene que parar la producción o cerrar cierta parte de la producción», explicó.

Estados Unidos tiene desplegada una gran flotilla en el Caribe y el Pacífico, encabezada por el portaaviones «USS Gerald Ford», el mayor del mundo.

En alta mar se desarrollan escenas de persecución. Fuerzas militares estadounidenses disparan contra presuntas embarcaciones de narcotraficantes, Washington y Caracas movilizan tropas y se envían mutuas advertencias.

A primera vista, el objetivo de Estados Unidos en este conflicto es acabar con el tráfico de drogas desde Venezuela hacia EE. UU. a través del mar abierto.

Pero, entre bastidores, hace tiempo que se especula sobre el futuro del gobernante Nicolás Maduro, cuyo régimen socialista cuenta con las mayores reservas de petróleo del mundo.
Los antecedentes del conflicto

«El conflicto actual entre Estados Unidos y Venezuela es mucho más que una disputa ideológica: refleja la competencia general por la energía, los mercados y la influencia geopolítica en la región», afirma a DW Demian Regehr, de la Fundación Hans Seidel, cercana al partido conservador alemán Unión Social Cristiana (CSU), desde Caracas.

Las tensiones no solo se dan con Estados Unidos, sino que también resurgen viejas disputas con el país vecino, Guyana.

Tras el descubrimiento de grandes yacimientos de petróleo en Guyana, el régimen de Maduro reactivó antiguas reivindicaciones sobre territorios de Guyana que permitirían a Caracas acceder a los yacimientos petrolíferos. Maduro se basa en antiguos acuerdos con la antigua potencia colonial británica.

El auge de Guyana

Desde 2015, la producción petrolera de Guyana solo conoce una dirección: al alza. «Mientras Caracas reafirma sus pretensiones, Estados Unidos protege a Guyana diplomática y militarmente, también para proteger las inversiones multimillonarias de sus empresas energéticas», afirma Regher.

La actual intervención militar de Estados Unidos contra Venezuela tiene, por tanto, el efecto secundario de permitirle estar rápidamente en el lugar de los hechos en caso de una posible invasión de Guyana por parte de Venezuela, algo que Maduro ha planteado en repetidas ocasiones.

Las empresas estadounidenses ExxonMobil y Chevron operan en Guyana. Con sus inversiones, han contribuido a aumentar la producción de petróleo del país a alrededor de un millón de barriles diarios.

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