INTERNACIONAL

Sin esperar al dictamen de las urnas, el candidato derechista a la presidencia de Brasil, Jair Bolsonaro, avanza en el diseño de su eventual política exterior: inició contactos con varios líderes de la región con el objetivo de formar una “alianza liberal y conservadora” en América Latina.

Pese a las continuas polémicas que lo tienen como protagonista en las pocas declaraciones que brinda a la prensa, Bolsonaro ya se puso en campaña por un objetivo de larga data: formar un bloque conservador en todo el continente. Ya en julio, el postulante había intentado organizar una “cumbre conservadora de las Américas” en Foz de Iguazú, pero la iniciativa que proponía debatir sobre política, economía, seguridad y cultura se frustró ante la falta de apoyo de políticos de alto nivel de la región.

La semana pasada, el propio Bolsonaro inició una serie de conversaciones en pos de esa alianza, al primero que llamó fue al presidente argentino, Mauricio Macri. En un breve diálogo, ambos se comprometieron a mantener la “relación estratégica” entre Brasil y Argentina, principales socios del Mercosur. Un par de días después, se comunicó con el presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, a quien le expresó su deseo de fortalecer las relaciones bilaterales. Entretanto, en su casa de Río de Janeiro recibió la visita de senadores chilenos de la Unión Democrática Independiente, socia del gobierno del presidente Sebastián Piñera, quien ya había elogiado las propuestas del gurú económico de Bolsonaro, Paulo Guedes. Fuentes del PSL indicaron que en los próximos días el postulante se comunicará con el propio Piñera y con el presidente de Colombia, el Iván Duque.

Resulta una incógnita el ámbito que tendría esta alianza, pues el Mercosur ni siquiera figura en la plataforma oficial del candidato, quien de hecho varias veces cuestionó al bloque regional (aunque luego se comprometió a no abandonarlo). La definición más clara que ha dado Bolsonaro respecto a la futura política exterior de Brasil fue su alineamiento absoluto a los Estados Unidos del presidente Donald Trump.