INTERNACIONAL

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) presentó y discutió el viernes un informe sobre la situación en Nicaragua, un día después de que el gobierno de Daniel Ortega y la opositora alianza Cívica retomaran el diálogo varias veces interrumpido.
La comisionada y relatora para Nicaragua, Antonia Urrejola, leyó el informe. «Nicaragua está en medio de una crisis de derechos humanos principalmente después de las protestas contra el gobierno de Ortega en 2018», dijo Urrejola.
Explicó que desde hace tres años representantes de Ortega no participan en las audiencias públicas de la CIDH, y desde diciembre pasado cerró sus puertas al escrutinio internacional en el terreno.
«Tras las protestas sociales iniciadas en Nicaragua a partir del 18 de abril de 2018, se ha presentado una respuesta estatal represiva, sistemática y grave en contra de la población», dijo Urrejola.
La represión estatal, ─explicó─, abarca aspectos que van desde la vida, integridad personal y salud, hasta la libertad de expresión, participación política, asociación, educación, trabajo y debido proceso.
