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Al menos cinco activistas fueron desalojados por empleados del puerto, añadieron estas fuentes.
Activistas de Greenpeace bloqueaba desde el viernes la descarga en el puerto de Sète (sureste) de un barco de bandera brasileña para denunciar «la falta de compromiso del gobierno francés sobre las causas del calentamiento global».
Detrás de la soja «se esconden la desforestación y las emisiones masivas de gases de efecto invernadero que están calentando nuestro planeta», señaló la ONG.
El carguero transportaba 50.000 toneladas de harina de soja, la mitad destinada a Francia y la otra mitad a Eslovenia, para alimentar a animales de la Unión Europea, según Greenpeace.
La soja comenzó a ser descargada el lunes por la tarde, pero una decena de activistas seguían encadenados a grúas, indicó a la AFP Marc Antoine, director del puerto de Sète.
