INTERNACIONAL

Lectura: 5 minutos

El presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, dijo el miércoles que su país había recuperado el control sobre Nagorno Karabaj, después que los combatientes separatistas armenios decidieran deponer las armas ante una ofensiva relámpago del Ejército azerbaiyano.

El sorprendente colapso de la resistencia representa una gran victoria de Aliyev.

«Azerbaiyán restableció su soberanía como resultado de las exitosas medidas antiterroristas en Karabaj», dijo Aliyev en un discurso televisado. El mandatario aseguró que la mayoría de las fuerzas armenias en la zona habían sido destruidas y que la retirada de los separatistas ya había comenzado tras la operación azerbaiyana, justificada por un presunto ataque de saboteadores.

Asimismo, expresó su satisfacción por la reacción de Armenia, que no envió fuerzas para apoyar a los separatistas. «Ayer, hoy, Armenia, inesperadamente, mostró competencia política, y eso lo valoramos», sostuvo el jefe de Estado.

«Espero que los pasos que estamos tomando, y los resultados de las medidas antiterroristas, finalmente permitirán eliminar los obstáculos a las conversaciones de paz».

Un día después de que Azerbaiyán lanzara una operación militar en la región, Bakú y las autoridades de Karabaj acordaron un cese de las hostilidades en el que los separatistas se comprometen a desmantelar su ejército. «Todas las armas y material de guerra pesado serán entregados» a las fuerzas de paz rusas, compuestas por 2.000 hombres, desplegadas en la zona. Las conversaciones para la reintegración de Karabaj a Azerbaiyán comenzarán este jueves.

Tras la caída de la Unión Soviética, separatistas armenios declararon la independencia de la zona, reconocida como parte de Azerbaiyán por la comunidad internacional. Entonces contaban con el respaldo armenio, que esta vez no llegó para reforzar la resistencia de los separatistas, armenios étnicos.

«Hoy la gente normal que vive en el Karabaj está ante una oportunidad histórica. No la desaprovechen. La población armenia que vive en la región azerbaiyana de Karabaj verá en breve cambios a mejor», dijo Aliyev, que prometió que Bakú busca «construir una vida en común sobre la base de la paz, la cooperación y el respeto mutuo». «Nosotros no tenemos problemas con el pueblo armenio. No albergamos enemistad», añadió.

Entre 1988 y 1994, ambos países sostuvieron una guerra que dejó unos 30.000 muertos. En 2020, una ofensiva de Azerbaiyán permitió capturar algunos territorios en torno a Nagorno Karabaj, un breve conflicto que dejó 6.500 muertos. Y ahora parece haber concretado la misión impuesta por Bakú de recuperar la totalidad de la región, en una operación militar marcada por los ataques aéreos, los bombardeos de artillería y drones que dejaron al menos 32 muertos, entre ellos 2 niños.

Tras la caída de la Unión Soviética, separatistas armenios declararon la independencia de la zona, reconocida como parte de Azerbaiyán por la comunidad internacional. Entonces contaban con el respaldo armenio, que esta vez no llegó para reforzar la resistencia de los separatistas, armenios étnicos.

«Hoy la gente normal que vive en el Karabaj está ante una oportunidad histórica. No la desaprovechen. La población armenia que vive en la región azerbaiyana de Karabaj verá en breve cambios a mejor», dijo Aliyev, que prometió que Bakú busca «construir una vida en común sobre la base de la paz, la cooperación y el respeto mutuo». «Nosotros no tenemos problemas con el pueblo armenio. No albergamos enemistad», añadió.

Entre 1988 y 1994, ambos países sostuvieron una guerra que dejó unos 30.000 muertos.

En 2020, una ofensiva de Azerbaiyán permitió capturar algunos territorios en torno a Nagorno Karabaj, un breve conflicto que dejó 6.500 muertos.

Y ahora parece haber concretado la misión impuesta por Bakú de recuperar la totalidad de la región.

«Nosotros no tenemos problemas con el pueblo armenio. No albergamos enemistad», añadió el presidente.

Asimismo, autoridades de Bakú indicaron que el jueves tendrán lugar las primeras negociaciones sobre la reintegración de ese territorio en disputa con Armenia.

Los separatistas armenios de Nagorno Karabaj ya habían anunciado este miércoles que depondrían las armas tras un acuerdo alcanzado con la mediación de las fuerzas rusas en la región.

«Se alcanzó un acuerdo sobre la retirada de las unidades y militares restantes de las fuerzas armadas armenias (…) y sobre la disolución y el desarme completo de las formaciones armadas del ejército de Nagorno Karabaj», declaró la presidencia separatista.

Las primeras conversaciones sobre la «reintegración» del territorio a Azerbaiyán se celebrarán el jueves en la ciudad azerbaiyana de Yevlax.

El ministerio azerbaiyano de Defensa precisó este miércoles que las fuerzas de Nagorno Karabaj depondrán las armas y el alto al fuego entrará en vigor este mismo miércoles a la 01:00 p.m. hora local.

Azerbaiyán lanzó el martes una operación militar de envergadura para recuperar la región que escapaba a su control desde hace más de 30 años.

*Imagen ilustrativa.

Otro artículo de interés: Ambicioso proyecto eléctrico Azerbaiyán-UE