INTERNACIONAL

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Indochina desapareció. Pero el conflicto sigue latente. El templo Preah Vihear está exactamente en la frontera en un terreno que ambos países reclaman. Los franceses dibujaron una línea fronteriza antes de retirarse, en mayo de 1954, abrumados por el conflicto con los nacionalistas, que Tailandia rechaza. Las escaramuzas son permanentes, con muertos y heridos de ambos bandos, donde el ejército tailandés esta mejor preparado según los especialistas. Por ahora la diplomacia para frenar una posible guerra abierta queda en manos de la ASEAN, la asociación que nuclea a los países del sudeste asiático. El panorama no es alentador.
Paetongtarn Shinawatra estaba suspendida en funciones desde el 1 de julio por el mismo tribunal que el viernes, 29 de agosto de 2025, ordenó su destitución. La primera ministra está acusada de vulnerar el código ético, luego de la publicación de una conversación telefónica donde la política calificó de «oponente» a un teniente general tailandés, que estaba al mando de un regimiento apostado en la conflictiva frontera con Camboya. El interlocutor de Paetongtarn Shinawatra al otro lado del teléfono era el exlíder camboyano Hun Sen.
El audio fue filtrado por el propio político camboyano, quien gobernó ese país entre 1985 y 2023. Hun Sen publicó en su perfil de Facebook el contenido de la llamada, ocurrida el 18 de junio, en un momento de tensión entre los países vecinos tras la muerte en marzo de un soldado camboyano en un combate en la frontera entre los Ejércitos.
Con la primera ministra, cae todo el Gabinete
Paetongtarn admitió que era su voz real y pidió disculpas al argumentar que su intención era calmar la situación en la frontera y tratar de evitar un enfrentamiento mayor, que finalmente estalló el 24 de julio y en el que murieron al menos 44 personas durante cinco días de combates.
Un panel de nueve magistrados del Tribunal Constitucional de Tailandia determinó que la primera ministra había vulnerado el código ético y que sus críticas «demostraron falta de unidad entre el Ejército y el Gobierno», por lo que la corte ordenó su destitución. La decisión del Tribunal supone además que todos los miembros del Gabinete de ministro deben abandonar sus puestos.
El jueves (24.07.2025), el ejército tailandés afirmó que había llevado a cabo ataques aéreos en el lado camboyano de su frontera con ese país. Esto después que, según Tailandia, el ejército de Camboya lanzara proyectiles de artillería en su contra.
El enfrentamiento entre estas naciones comenzó cerca del templo disputado de Ta Moan Thom, en medio de acusaciones cruzadas por el inicio de los ataques.
Desde mayo de 2025, las tensiones entre estos vecinos del sudeste asiático se han intensificado, después que un soldado camboyano muriera en un intercambio de disparos con tropas tailandesas mientras cavaba trincheras en la frontera en disputa.
A principios de esta semana, una mina terrestre hirió a varios soldados tailandeses, y Bangkok acusó inmediatamente a Camboya de colocar nuevos artefectos de este tipo, mientras que Phnom Penh argumentó que lo más probable era que se tratara de una de las muchas minas instaladas en la zona en la década de 1980.
Como respuesta a los últimos acontecimientos, Tailandia y Camboya rebajaron sus relaciones diplomáticas. Un día después, estallaron los enfrentamientos directos. Ahora queda por ver si los ataques militares continuarán y se intensificarán hasta convertirse en una guerra más amplia.
«El conflicto armado podría resolverse rápidamente; la guerra no es en absoluto inevitable», comenta a DW Bradley Murg, investigador principal del Instituto Camboyano para la Cooperación y la Paz. «Sin embargo, las tensiones subyacentes y la resolución de la cuestión fronteriza se prolongarán», añade.
Camboya y Tailandia reclaman la soberanía sobre varios territorios desde hace más de un siglo, tras la redefinición de las fronteras nacionales en la Indochina francesa. Aunque ambas partes han intentado resolver estas cuestiones mediante negociaciones, en 2008 estallaron enfrentamientos militares por la propiedad de un templo cerca de la ciudad de Preah Vihear.
La tensión se prolongó durante cinco años y alcanzaron su punto álgido en 2011, cuando varios soldados murieron en una escaramuza. En 2013, la Corte Internacional de Justicia dictaminó que la mayor parte del territorio en cuestión pertenecía a Camboya.
La actual oleada de violencia es la peor desde 2011 y tiene unas dimensiones ligeramente diferentes, ya que entra en juego la política interna tailandesa y el sentimiento nacionalista que ha sido alimentados por reivindicaciones revanchistas sobre algunos territorios.
La crisis fronteriza se politiza
Tras la muerte del soldado camboyano que cavaba trincheras, ambos países enviaron tropas a la región y reforzaron los controles fronterizos. Una llamada telefónica hecha en junio entre el presidente del Senado camboyano, Hun Sen, y la primera ministra tailandesa, Paetongtarn Shinawatra, supuso un intento para aliviar las tensiones, pero terminó agravando aún más la situación.
Hun Sen, durante décadas primer ministro y hombre fuerte de Camboya, y aún líder de facto, filtró la llamada telefónica, en la cual Paetongtarn lo llamó «tío» e hizo comentarios despectivos sobre el ejército tailandés. Estos comentarios desencadenaron una crisis en la política tailandesa.
Finalmente, el Tribunal Constitucional intervino para suspender a la primera ministra de Tailandia.
Joshua Kurlantzick, investigador principal para el Sudeste Asiático del Consejo de Relaciones Exteriores de Estados Unidos, dice a DW que este conflicto podría «aumentar aún más el poder del ejército tailandés y darle más influencia sobre la política».
Thitinan Pongsudhirak, investigador principal del Instituto de Seguridad y Estudios Internacionales de Tailandia destaca que «el peligro es que el ejército tailandés se ha hecho cargo de la política fronteriza, mientras que Hun Sen parece decidido a seguir provocando y agitando a un Gobierno tailandés débil y dividido», añadió.
Zachary Abuza, profesor del Colegio Nacional de Guerra de Washington, señala, por su parte, que un conflicto militar prolongado no favorece a Camboya. El terreno de la región del «Triángulo Esmeralda» favorece a Tailandia, el ejército tailandés es una fuerza mejor equipada, destaca a DW.
Tailandia también tiene ventaja al disponer de más formas de perjudicar económicamente a Camboya, añadió Abuza. «Camboya depende mucho más de las exportaciones a Tailandia que al revés». Además, Tailandia puede desempeñar un papel importante a la hora de ejercer presión internacional sobre la industria ilegal de estafas cibernéticas de Camboya.
«Bangkok entiende que este es el centro de gravedad de Hun Manet; son estos ingresos los que le permiten mantener la red de patrocinio del Partido Popular Camboyano (CPP)», dice Abuza a DW.
A medida que se intensifica la actual ola de violencia, Malasia intenta mediar para solucionar el conflicto, en su calidad de presidente del bloque de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN). El primer ministro malasio, Anwar Ibrahim, dijo recientemente que había hablado con el primer ministro camboyano Hun Manet y con el primer ministro interino tailandés, Phumtham. «En nuestras conversaciones hice un llamado directo a ambos líderes para que se produjera un alto el fuego inmediato con el fin de evitar nuevas hostilidades y crear un espacio para el diálogo pacífico y la resolución diplomática», declaró.
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