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Rusia aseguró haber rechazado un ataque con drones en la bahía ucraniana de Sebastopol, en la península de Crimea que fue asaltada en 2014 por tropas del Kremlin.

Desde el Ministerio de Defensa ruso acusaron a Londres de haber ayudado a los ucranianos a planearlo.

El viceministro de Relaciones Exteriores ruso, Alexander Grushko, señaló que el despliegue acelerado de armas nucleares tácticas B61-12 de EE. UU., en las bases europeas de la OTAN, reduciría el «umbral nuclear».

Aseguró que Moscú tomaría medidas.

La Marina rusa estacionada en el Mar Negro informó el sábado que sus militares rechazaron un ataque con drones en Sebastopol, ciudad portuaria en la península de Crimea, en el sur de Ucrania, que fue anexada por Moscú en 2014.

«Los barcos de la Flota del Mar Negro repelieron un ataque con aviones no tripulados en las aguas de la bahía de Sebastopol», declaró Mikhail Razvozhayev, el gobernador regional impuesto por el Kremlin.

Las autoridades locales afirmaron que sus defensas evitaron que la infraestructura resultara dañada, sin embargo aseguraron que se trató del ataque «más masivo» en la península desde el inicio del conflicto.

Informaron que se decidió cerrar el cruce de la bahía de Sebastopol en barco, de forma temporal y como medida de precaución.

«Nada ha sido afectado en la ciudad. Estamos tranquilos. La situación está bajo control».

El portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov, acusó a Reino Unido de haber ayudado a Ucrania en la planificación de un ataque que tildó de «terrorista».

Además dijo que los británicos estuvieron involucrados en la voladura de los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2.

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