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La presidenta peruana, Dina Boluarte, quien ha dicho que encabeza un gobierno de transición, instó al Congreso del país a aprobar una propuesta para adelantar elecciones generales.
Boluarte, exvicepresidente de Perú, asumió la presidencia a principios de este mes después de que el entonces presidente de izquierda, Pedro Castillo, intentara disolver ilegalmente el Congreso y fuera arrestado.
Desde entonces, han estallado protestas en todo el país y al menos 17 personas han muerto. Otros cinco han muerto por consecuencias indirectas de las protestas, según las autoridades.
Boluarte respondió el sábado a los manifestantes que le pedían que renunciara, diciendo que «eso no resuelve el problema» y que ella había hecho su parte al enviar el proyecto de ley al Congreso.
El viernes, el Congreso de Perú rechazó la reforma constitucional propuesta para adelantar las elecciones a diciembre de 2023. Algunos miembros del Congreso han pedido a la legislatura que reconsidere la propuesta.
«Exijo que se reconsidere la votación para llevar a elecciones», dijo Boluarte, criticando a los congresistas que previamente se habían abstenido de votar.
También desestimó los llamados a una asamblea constituyente, diciendo que «no era el momento».
Boluarte dijo que también habría una reorganización de su gabinete en los próximos días, luego de la renuncia de los ministros de Educación y de Cultura el viernes.
«Tendremos una recomposición del Gabinete, para poder instalar ministros conocedores de cada sector», dijo.
Las salidas del gabinete el viernes pasado plantean dudas sobre la longevidad del gobierno de Boluarte, que se ha visto sacudido por la turbulencia política.
Las protestas desde el arresto del expresidente Castillo, quien se encuentra en prisión preventiva mientras enfrenta cargos de rebelión y conspiración, han paralizado el sistema de transporte de Perú, cerrando aeropuertos y bloqueando carreteras.
El miércoles, el gobierno de Boluarte anunció el estado de emergencia, otorgando poderes especiales a la policía y limitando los derechos de los ciudadanos, incluido el derecho de reunión.
Los manifestantes también han bloqueado las fronteras de Perú, dejando a los turistas varados y estrangulando el comercio.
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