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Imágenes de aviones espías U2 mostraron que el globo chino que sobrevoló Estados Unidos la semana pasada estaba equipado con dispositivos para recopilar datos de inteligencia y no meteorológicos, aseguró un alto funcionario del Departamento de Estado este jueves.

El equipamiento del globo «era claramente para la vigilancia de inteligencia y era inconsistente con el equipo a bordo de los globos meteorológicos», indicó en condición de anonimato.

«Tenía múltiples antenas para incluir una matriz probablemente capaz de recopilar y geolocalizar comunicaciones», señaló en una nota oficial.

Asimismo, la fuente precisó que Estados Unidos cree que el globo estaba bajo control del Ejército Popular de China y es parte de una flota de globos que Pekín ha enviado a más de 40 países en los cinco continentes para recopilar información de inteligencia.

Un avión de combate estadounidense derribó el globo sobre el Atlántico el sábado después de que había cruzado gran parte del país, incluso áreas donde Estados Unidos guarda misiles nucleares en silos subterráneos y bases de bombarderos estratégicos.

La presencia del globo llevó al secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, a cancelar un viaje inminente a Pekín que estaba planeado desde hacia mucho tiempo y que tenía como objetivo mejorar las relaciones entre las dos superpotencias rivales.

El gobierno chino confirmó el lunes que el globo que se detectó sobrevolando Latinoamérica es suyo, después que un artefacto similar fuese derribado por Estados Unidos este fin de semana.

La fuerza aérea colombiana había indicado que «un objeto» con «características similares a las de un globo» fue detectado y monitoreado «hasta que abandonó el espacio aéreo».

El ministerio chino de Relaciones Exteriores explicó este lunes que el objeto era «de naturaleza civil y usado para pruebas de vuelo» y que debido a «las fuerzas meteorológicas y de su maniobrabilidad limitada se desvió seriamente de su ruta programada» y se dirigió «accidentalmente hacia América Latina y el Caribe».

«Estamos manejando (la situación) de forma adecuada y no causaremos ninguna amenaza a ningún país», aseguró el portavoz Mao Ning en rueda de prensa.

La detección del primer globo que sobrevolaba Estados Unidos condujo a la cancelación de un viaje del secretario de Estado estadounidense Antony Blinken, quien debía haber llegado a Pekín el domingo.

China protestó por la decisión de Estados Unidos de derribar el globo, que según Pekín era de carácter civil y se había desviado de curso a causa del viento.

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