Israel ataca en Damasco a fuerzas terroristas islámicas

INTERNACIONAL

50375802637_b4cf4e7eac_c
Foto: Foreign, Commonwealth & Development Office*

Lectura: 7 minutos

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), una ONG con una enorme red de informantes en Siria, informó que un bombardeo israelí lanzado la madrugada de este domingo dejó al menos quince muertos. De acuerdo con la entidad, entre las víctimas del ataque contra el barrio de Damasco donde están las agencias de seguridad e inteligencia, hay civiles, incluidas dos mujeres.

«El bombardeo del domingo es el ataque israelí más mortífero en la capital siria», dijo Rami Abdelrahman, director del OSDH. «Los misiles israelíes apuntaron a sitios utilizados por las milicias iraníes y el Hezbolá libanés», apuntó Abdelrahman. El ataque golpeó un edificio de diez plantas cerca del Centro Cultural Iraní en el barrio de Kafr Sousa.

Se cree que en la zona hay también bases con funcionarios iraníes. La prensa siria informó inicialmente de cinco muertos y 15 heridos. «El ataque causó daños en varias residencias civiles y daño material a una serie de barrios de Damasco y sus alrededores», apuntó el Ejército sirio en un comunicado. Un portavoz israelí contactado por la agencia AFP evitó hacer comentarios «a medios extranjeros» sobre el ataque.

El ministro de Exteriores de Siria, Faisal Mekdad, aseguró que el ataque debería ser considerado «un crimen contra la humanidad», teniendo presente que tiene lugar a menos de dos semanas de un terremoto que dejó más de 5.800 muertos en el país. Los edificios históricos cercanos a la ciudadela medieval de Damasco también resultaron «gravemente dañados», declaró el jefe del departamento de antigüedades sirio, Nazir Awad.

«El enemigo israelí realizó una agresión aérea desde los ocupados Altos del Golán contra varias zonas de Damasco y sus alrededores, incluyendo barrios residenciales», indicó en un comunicado el Ministerio de Defensa. El Ministerio de Exteriores, en tanto, denunció «una agresión que se inscribe en el marco de los ataques aéreos sistemáticos contra objetivos civiles», subrayando que ocurren cuando Siria «sigue sufriendo efectos del sismo».

La portavoz del Ministerio ruso de Relaciones Exteriores condenó el ataque y urgió a Israel a «poner fin a las provocaciones armadas» contra Damasco. En tanto, un portavoz de la diplomacia iraní, Naser Kanani, «condenó firmemente el ataque del régimen sionista contra objetivos en Damasco y en su periferia, incluyendo algunos edificios residenciales».

El Comando Central (CENTCOM) de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos anunció a fin de diciembre pasado que sus efectivos mataron a dos altos cargos de la organización terrorista Estado Islámico (EI) en una operación en el este de Siria.

El CENTCOM dijo en un comunicado que la operación tuvo lugar la madrugada de este domingo 21 cuando las fuerzas estadounidenses realizaron una «exitosa incursión en helicóptero» que resultó en la muerte de «dos oficiales del EI».

EE. UU. identificó a uno de los fallecidos como Anás, un oficial provincial del Estado Islámico «que estuvo involucrado en las operaciones de facilitación y conspiración mortal del grupo en el este de Siria», según el comunicado, que no dio más detalles sobre el otro yihadista.

La nota tampoco reveló dónde se produjo exactamente la operación, que fue realizada «de forma unilateral» por Estados Unidos y en la que, según evaluaciones iniciales, ningún civil resultó herido o muerto.

«La muerte de estos oficiales del EI interrumpirá la capacidad de la organización terrorista para planear y llevar a cabo más ataques desestabilizadores en el Medio Oriente», aseguró el portavoz del CENTCOM, Joe Buccino, en declaraciones recogidas en el comunicado.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó que la operación estadounidense se realizó conjuntamente con unas unidades especiales de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza liderada por kurdos aliada de Washington.

La ONG, con sede en Londres pero con una amplia red de colaboradores sobre el terreno, indicó que la incursión se produjo en Deir al Zur, donde «helicópteros» estadounidenses atacaron una vivienda con «ametralladoras pesadas».

Esto se produce unas semanas después de que el Estado Islámico anunciara la muerte de su líder, Abu al Hasan al Qurashi, que según Washington murió en octubre en una operación de grupos rebeldes en la provincia de Deraa, en el sur de Siria.

Estados Unidos lidera una coalición internacional de lucha contra el EI en Siria e Irak, y los dos anteriores líderes del grupo terrorista murieron en operaciones de sus tropas en la provincia de Idlib, el último bastión opositor en el noroeste de Siria.

Miles de kurdos de Siria se manifestaron en Qamishli, Deir al Zur, Kobane y Al Derbasiyah, entre otras de la provincia de Al Hasaka, para protestar contra los recientes bombardeos turcos contra esta región controlada por la administración semiautónoma kurda. Desde el 20 de noviembre, unas 65 personas murieron por los bombardeos turcos, principalmente en el noreste de Siria. Entre las víctimas hay combatientes kurdos y miembros del ejército sirio.

Esta operación aérea contra las fuerzas kurdas en Siria y el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en Irak es como venganza por el atentado del 13 de noviembre en Estambul, que causó seis muertos. Según las autoridades turcas, los kurdos perpetraron ese ataque, algo que las fuerzas kurdas desmienten.

Tras tres días de relativa calma, las tropas leales a Ankara bombardearon una aldea y un aeropuerto militar en la provincia de Alepo que alberga efectivos de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza liderada por kurdos, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH). Cinco soldados murieron en el ataque de un dron turco en un pueblo cerca de la ciudad de Tal Rifaat, al norte de Alepo, precisó el OSDH.

En Qamishli, miles de manifestantes denunciaron los ataques de Turquía, y una posible ofensiva terrestre que Ankara amenaza con lanzar. Los manifestantes llevaban banderas kurdas y retratos de Abdulá Ocalan, líder histórico del PKK, encarcelado en Turquía, y gritaban lemas contra el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan. Los manifestantes condenaron «el silencio internacional ante los ataques turcos contra los territorios sirios».

«La voluntad del pueblo kurdo no se romperá, no nos iremos de nuestra tierra histórica», declaró a la AFP Siham Sleimane, una manifestante de 49 años. «Somos víctimas de una erradicación», dijo otro participante, Salah el-dine Hamou, de 55 años.

Las fuerzas kurdas sirias, apoyadas por una coalición internacional liderada por Estados Unidos, encabezaron la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI), expulsado de sus bastiones en Siria en 2019.

*Imagen ilustrativa.

Otro artículo de interés: Argentina denuncia a Israel por conflicto en Cisjordania

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s