INTERNACIONAL

Lectura: 3 minutos
Una inesperada decisión del gobierno de Vladímir Putin divulgada oficialmente en las últimas horas del lunes abrió un compás de espera en el grave diferendo que mantienen Rusia con Ucrania, como expresión de enfrentamiento con el bloque occidental, la OTAN y Estados Unidos.
Ocurrió pocas horas después de la charla telefónica entre el presidente Joe Biden y su par Vladímir Putin.
Rusia anunció en las últimas horas del lunes que algunas de las unidades militares desplegadas cerca de la frontera ucraniana, cuya presencia hacía temer una operación bélica inminente en el país vecino, comenzarán a volver a sus respectivos cuarteles. La información oficial no destaca la cantidad de soldados involucrados.
«Las unidades de los distritos militares sur y oeste, que ya concluyeron sus tareas, comenzaron a cargar en medios de transporte» y «empezarán a regresar a sus cuarteles hoy», anunció el portavoz del ministerio, Igor Konashenkov, citado por agencias de prensa.
«Siempre dijimos que después de las maniobras (…) las tropas volverán a sus cuarteles de origen. Y eso es lo que está ocurriendo ahora. Es el proceso habitual», dijo a la prensa el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov. El funcionario indicó que en el futuro Moscú va a organizar «más ejercicios en toda Rusia» y reivindicó el derecho del país a llevar a cabo maniobras en su territorio.
Tras ello, Peskov denunció una «campaña absolutamente sin precedentes orientada a provocar tensiones», al referirse a las especulaciones de que Rusia estaría preparando una invasión a Ucrania. «Este tipo de histeria no tiene ninguna base», aseguró el portavoz.
La respuesta llegó de inmediato de la cancillería de Kiev.
«Ucrania se creerá la retirada de algunas unidades militares rusas de sus fronteras cuando lo vea con sus propios ojos», dijo hoy el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmitro Kuleba.
«Hay diferentes declaraciones desde la Federación Rusa todo el tiempo. Tenemos una regla: no nos lo creemos cuando lo oímos, sino cuando lo vemos», señaló en una rueda de prensa en línea.
«Cuando veamos la retirada (de los soldados rusos) entonces creeremos en una desescalada», añadió.
Rusia anunció hoy el comienzo del retorno a sus cuarteles permanentes de las unidades que ya concluyeron sus ejercicios en las circunscripciones militares Oeste y Sur, ambas limítrofes con Ucrania.
Otro informe altamente preocupante llegó de fuentes occidentales.
Mercenarios rusos con vínculos a agentes de inteligencia de Moscú han aumentado su presencia en Ucrania en las últimas semanas, según fuentes confiables.
Algunos miembros de la OTAN sospechan que Rusia intenta armar un pretexto para una invasión, dijeron tres fuentes de seguridad occidentales de alto rango, utilizando agentes de inteligencia.
Las fuentes afirmaron que en las últimas semanas se ha incrementado la preocupación acerca de una incursión rusa en Ucrania que podría ir precedida de una guerra de información y ciberataques a las infraestructuras críticas ucranianas, como las redes de electricidad y gas.
*Imagen ilustrativa.
Otro artículo de interés: Tímida luz de esperanza en conflicto Rusia-Ucrania